Aristas económicas del conflicto de Ucrania

Sanciones de la Comunidad Europea. Una dura agenda motorizada por EEUU. Europa estudia el impacto en su propia economía. NordStream 2 y provisión de GL de EEUU. GB adopta sanciones comercio marítimo. Antecedentes. Compromisos multilaterales. Euromaidán.


En momentos en que se cierra esta nota, la segunda reunión bilateral entre Moscú y Kiev concluyó con un compromiso de “abrir corredores humanitarios para civiles” con un posible alto el fuego durante las evacuaciones. En tanto el presidente ucraniano Zelenski pide hablar directamente con el presidente ruso: “Es la única forma de detener la guerra”, afirmó.

El 23 de febrero, un día previo a la operación militar rusa que devino en la ocupación (definida como desnazificacion y desmilitarizacion sin ocupación permanente por el gobierno de Putin) del este de Ucrania y su capital Kiev, el departamento del Tesoro de EEUU publicó una lista detallada de las nuevas sanciones.

Cuando lo hizo, señaló que las medidas "afectan a casi el 80 % de los activos bancarios de Rusia y tendrán un efecto profundo y duradero en la economía y el sistema financiero rusos". Las medidas “sin precedentes”, fueron aprobadas parcialmente por los embajadores de la Comisión Europea.

En principio, varios países dieron un apoyo relativo, por el impacto que podrían tener en sus propias economías, como Italia, Chipre y Hungría. También Alemania, a pesar de haber suspendido la habilitación del gasoducto Nord Stream 2, fundamental para la provisión de gas a bajo precio para su población, se resistía a sacar a la Federación Rusa del sistema SWIFT, necesaria para el desarrollo de las transacciones internacionales con occidente. En el día de ayer, Emmanuel Macron sorprendió con sus declaraciones en relación con la preocupación sobre las sanciones, que afectarán de una manera significativa al crecimiento económico de Francia, por su alta dependencia de Rusia.

Finalmente, en lo financiero, la decisión de los embajadores europeos fue la de limitar la exclusión del sistema de mensajería financiera SWIFT, a siete bancos rusos, aunque eximieron de la medida al mayor banco del país, Sberbank PJSC, y a un banco de propiedad parcial del gigante ruso de gas Gazprom PJSC.

VTB Bank PJSC y Bank Rossiya se encuentran entre los bancos que enfrentarían una prohibición de acceder al sistema de mensajería que permite transacciones por billones de dólares en todo el mundo, según funcionarios familiarizados con la decisión.
Las otras instituciones incluidas en la lista de la Unión Europea son Bank Otkritie, Novikombank, Promsvyazbank PJSC, Sovcombank PJSC y VEB.RF

Las sanciones de EEUU. Medidas "sin precedentes" contra múltiples bancos rusos, entre ellos las dos mayores instituciones financieras del país: Sberbank y VTB Bank.

Sanciones a Sberbank en materia de cuentas de corresponsalía y cuentas de pago. Sanciones de bloqueo total a VTB Bank y sus 20 filiales, que incluyen bancos, sociedades de cartera y otras empresas financieras situadas en Rusia y en otros ocho países

Sanciones de bloqueo a otras tres importantes instituciones financieras rusas: Otkritie, Novikombank y Sovcombank y sus filiales

Prohibiciones de deuda y capital contra las principales entidades estatales y privadas de Rusia. EEUU prohíbe las transacciones y operaciones por parte de ciudadanos estadounidenses o dentro del país norteamericano en la nueva deuda con un vencimiento superior a 14 días. Sanciones a 13 empresas estatales y privadas rusas.

Sanciones contra las "élites" políticas y financieras. Las medidas fueron impuestas contra el hijo de Serguéi Ivanov, representante especial del presidente ruso para cuestiones medioambientales, ecológicas y de transporte; el de Nikolái Pátrushev, secretario del Consejo de Seguridad de Rusia; el de Ígor Sechin, director general de la compañía petrolera Rosneft; así como contra Alexander Vediajin, primer vicepresidente del Consejo de Administración de Sberbank, entre otros

Por otro lado, Biden comunicó que Washington restringirá la mitad de las importaciones tecnológicas, así como el comercio de ciertas mercancías, para prevenir la modernización de la industria rusa.

SPFS. SWIFT es esencialmente un sistema de mensajería mediante el cual los bancos se comunican sobre las transferencias monetarias y no el sistema que realmente realiza las transferencias, indica el politólogo Daniel Treisman. De esta forma, aunque negar el acceso al SWIFT genera problemas a corto plazo a los bancos, en principio, la Federación podría superar estos obstáculos. “Rusia ya ha creado su propio sistema sustituto, que ha estado funcionando para transacciones internas y podría potencialmente extenderse a transacciones internacionales”, explicó, al referirse al Sistema de Transferencia de Mensajes Financieros (SPFS), fundado por Moscú en 2014, en momentos en que sufría sanciones por la ocupación de Crimea.

El entramado energético Rusia-UE. Las medidas motorizadas por Estados Unidos, ante una Unión Europea por ahora carente de respuestas diplomáticas y económicas unificadas frente al conflicto, están muy emparentadas con su propio negocio gasífero en Europa, a la que provee de gas licuado a un precio 5 veces más elevado que Rusia. En este sentido, un objetivo clave de la potencia del norte era la de paralizar el gasoducto por el Mar Báltico para sostener la venta del gas propio y reintentar imponer el paralizado proyecto Nabucc, sostiene el analista del IADEG Rubén Darío Guzetti.

Europa divide sus reacciones. Lo cierto es que Rusia potenció su entramado energético y comercial con Europa hasta tal punto que el propio presidente Emmanuel Macron, sorprendió con sus declaraciones en las que lamentó que la economía de su país esté sufriendo por las sanciones que se están imponiendo a Rusia y que este impacto llegue a todos los sectores, por la dependencia de la agricultura y la industria de materias primas importadas desde Rusia y Ucrania. Al mismo tiempo, destacó que el conflicto en Ucrania afectará de una manera significativa al crecimiento económico de Francia, pues el aumento de precios del gas, petróleo y las materias primas tiene y seguirá impactando la capacidad adquisitiva de los franceses. En particular, la empresa francesa Engie corre el riesgo de perder 987 millones de euros si el gasoducto Nord Stream 2 se declara en quiebra, expresó Macron, graficando una relación por demás consolidada, especialmente en el terreno energético.

En el mismo sentido, puertos franceses están recibiendo buques rusos con GNL, impedidos de entrar a GB (ver más abajo).

Incluso EEUU, a pesar de haber diseñado un paquete de duras sanciones económicas, debió rever la decisión de sancionar a la empresa de Nord Stream 2 y su director ejecutivo alemán, Matthias Warnig, por razones de "interés nacional", y en aras de mantener sus relaciones transatlánticas con la potencia europea. El proyecto, concluido totalmente y solo pendiente de la certificación de Alemania, fue suspendido por el conflicto con Ucrania. El gasoducto pretende distribuir 55.000 M de metros cúbicos de gas natural al año desde Rusia a Alemania, pasando por Dinamarca, Finlandia y Suecia. Con lo que se llegaría a los 110.000 M de metros cúbicos anuales.

Gran Bretaña y caóticas sanciones portuarias

Una serie de perjuicios económicos se desencadenan con la intempestiva prohibición sin reglas claras, de la entrada de naves rusas a puertos británicos, especialmente por la provisión de combustible de ese origen, explica Lloyd's List Intelligence.

No está prohibido el ingreso a puertos británicos de cargamentos rusos, pero si de buques total o parcialmente de ese origen.

Los gobiernos que busquen bloquear la entrada a los puertos de buques de propiedad o controlados por intereses rusos tendrán que rastrear una lista global de 6.448 buques, según datos del sitio especializado en información maritima.

Si bien la flota total de embarcaciones con vínculos de propiedad real rusa es enorme, hay una lista prioritaria de 429 embarcaciones que comercian internacionalmente con más de 10,000 TPM. Casi el 20% de estos buques son petroleros de crudo. Los graneleros y petroleros de productos representan el 16% y el 12%, respectivamente.

La prohibición del Reino Unido, que entró en vigor el 1 de marzo, fue rápidamente seguida por la adopción de una resolución por parte del Parlamento Europeo que intenta presionar al resto de la Unión Europea para que bloqueen de manera similar la entrada de los buques rusos a sus puertos.

Canadá también ha implementado una prohibición de que los barcos rusos ingresen a los puertos.

En 2021, los puertos del Reino Unido y la UE recibieron colectivamente un volumen mensual promedio de 829 buques afiliados a Rusia.

La rápida introducción de la prohibición ha dejado a los funcionarios de la industria, empresas individuales y varios altos funcionarios del gobierno luchando por mantenerse al día con las implicaciones comerciales de los cambios anunciados, cortando la cadena de pagos.

Efecto relativizado. En lo económico, no se espera una gran repercusión, no sólo por el comportamiento de los mercados, sino porque Moscú afronta las sanciones con una situación financiera mucho más fuerte que en 2014, cuando la UE y EE UU aprobaron represalias comerciales por la anexión de la península ucrania de Crimea. El Kremlin ha logrado acumular un fondo soberano que, a 1 de febrero, sumaba 174.900 millones de dólares (más de 157.000 millones de euros), que según historiadores como Juan Camilo Vergara, dan cuenta del gran crecimiento que la Federación Rusa logró con las sanciones por la incorporación de Crimea, esencialmente por la compra de empresas cuyos inversores dejaron el país, que se transformaron en estatales a muy bajo costo de adquisición.

Algunos antecedentes del conflicto

El Ejército ruso, en la semana del 21 de febrero, confirmó el inicio de bombardeos en territorio ucraniano, asegurando que los ataques serían “quirúrgicos”y tendrían como objetivo solo las bases aéreas ucranianas y otras zonas militares, no las zonas pobladas. Sin embargo, a principios de marzo, iniciadas las rondas de negociaciones bilaterales, el ejército ruso avanzó sobre poblaciones civiles con el objetivo de allanar el camino hacia Mikoláiv, una gran ciudad de medio millón de habitantes que ya está bajo ataque, y hacia Odesa, el principal puerto ucranio en el mar Negro.

Si bien Vladimir Putin, aseguró que la operación militar está destinada a proteger a los civiles de etnia rusa en las provincias de Donetsk y Lugansk, cuyas independencias reconoció el pasado 21 de febrero, ese no fue el único y principal motivo del despliegue. De acuerdo con el presidente ruso, no se llevará a cabo una ocupación permanente, sino una desmilitarizacion de Ucrania, aprovisionada de armamento por parte de la alianza atlantista.

Poco tiempo antes, en una maniobra atribuida a la Organización del Atlántico Norte, OTAN, virtualmente hegemonizada por EEUU, el primer mandatario ucraniano Volodimir Zelensky, no solo manifestó su deseo de sumarse a la OTAN, sino también de intentar desarrollar armamento nuclear con la tecnología remanente en su territorio de la época del bloque socialista. El temerario pedido de Zelensky, produjo que finalmente la Organización del Atlántico Norte lo dejara solo en el conflicto, ya desbordado. A pesar del apoyo del Parlamento Europeo -dominado por partidos de derecha- a la inclusión de Ucrania en la Unión Europea, la idea fue descartada por la Comisión. Con antelación, Europa y las fuerzas de la OTAN advirtieron a Zelensky, que maneja el ejército y fuerzas de elite con gran poder de fuego, en que la escala del conflicto no debería dañar bajo ninguna circunstancia, el gasoducto que pasa por Ucrania y provee de gas ruso a Europa.

La inclusión ucraniana en la alianza atlantista, constituiría una más de las violaciones occidentales al compromiso firmado con Gorbachov y Yeltsin, para frenar el avance de la militarización occidental hacia las fronteras de la Federación. Contraviniendo este compromiso, se avanzó en la adhesión a la OTAN de las ex repúblicas socialistas.

De acuerdo con Vasili Nebenzia, representante permanente de la Federación Rusa ante las Naciones Unidas, las declaradas operaciones militares de ese país se produjeron ante la fehaciente información de un ataque que Kiev estaba preparando en Donbas (zona de conflictos en el este de Ucrania, que incluye a Donetsk y Luhansk).

Desde el punto de vista militar, el cerco de la OTAN al territorio ruso en la actualidad, comenzó con el acopio desde el año pasado, de armamento misilístico proporcionado a Ucrania por socios de la organización atlantista, y avanzó hacia la frontera con la Federación Rusa, en oposición a lo establecido en el Protocolo de Minsk de setiembre de 2014.

La OTAN completó la operación con el reciente despliegue de tropas y armamento misilístico en países cercanos a las fronteras rusa y ucraniana, como Polonia, Rumania y los países bálticos.

Euromaidán.
El Euromaidán de 2014, un golpe de estado en el que participaron heterogéneos grupos civiles y parte del ejército, en un todo apoyado por la fuerza atlantista de la OTAN, depuso en Ucrania al gobierno prorruso de Yanukóvich, que dejó suspendida la firma de un Acuerdo de ese país con la UE y consiguientemente su ingreso a la alianza militar atlántica. El nuevo gobierno surgido del golpe institucional, fue hegemonizado por sectores de ultraderecha, que llevaron a una guerra civil, a las provincias del este de Ucrania.

En 2014 y 2015 se concretan los acuerdos de Minsk I y II, que auspiciados por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), preveia poner fin a la guerra desatada contra las dos provincias prorrusas, Donetsk y Luhansk, después de los referendums que establecieron su relativa autonomía del gobierno central. Sin embargo, el gobierno de Poroshenko primero y el de Zelenski después no cumplieron con lo firmado, y desataron una guerra civil, señala Guzetti

Beijing ante la crisis de Ucrania

La República Popular China se posicionó respaldando a su socio mayor del BRICs en su ofensiva, y en la justicia de su reclamo por la seguridad de su país en la ofensiva del 24 de febrero. El avance de las fuerzas de la OTAN hacia la frontera rusa, responde no sólo al terreno de la competencia por los mercados del gas en Europa. También responde a la necesidad de intentar entorpecer el meteórico desarrollo de la Franja, la Ruta que la RP China desplegó en toda Europa y que será un formidable corredor comercial y de dominio geopolítico.

En este marco es que se deben leer las expresiones del consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, que aclaró al secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, que la posición de China sobre el tema de Ucrania ha sido consistente: “Se deben respetar las preocupaciones de seguridad legítimas de cualquier país y se deben defender los propósitos y principios de la Carta de la ONU”. En el mismo sentido, el embajador chino ante la ONU, Zhang Jun, en la reunión del Consejo de Seguridad, sostuvo que todas las partes involucradas deben continuar el diálogo y las consultas, y buscar soluciones razonables para abordar las preocupaciones de los demás sobre la base de la igualdad y el respeto mutuo. China tiene vínculos estratégicos estrechos con Rusia, pero siempre se ha mantenido neutral e instó a las partes relevantes a manejar la situación a través de la negociación diplomática, reseña Dang Dai.

Cui Hongjian, director del Departamento de Estudios Europeos del Instituto de Estudios Internacionales de China, sostuvo que “desde el comienzo de la crisis en Ucrania, EEUU realizó una serie de despliegues militares en Europa, con una postura política muy débil”. “Washington insistió repetidamente en que no entraría en guerra con Rusia”, pero prosiguió enviando armamentos para efectivizar el bloqueo de la OTAN. También sostuvo que “creemos que la tarea más urgente en este momento es instar a las partes relevantes a hablar y no tener ningún conflicto. En segundo lugar, Rusia y Ucrania podrían resolver el problema cara a cara. En tercer lugar, Occidente, especialmente los Estados Unidos, debería dejar de intensificar aún más la tensión haciendo más despliegues militares e imponiendo más sanciones”, señaló al mismo medio.

China mantiene vínculos estratégicos estrechos con Rusia y también cuenta con muchas inversiones y una cooperación de larga data con Ucrania, por lo que se mantiene neutral, con la abstención a la condena a Rusia en el Consejo de Seguridad de ONU, y las últimas conversaciones presidenciales, en las que Xi Jin Ping instó a su par ruso Vladimir Putin, a resolver el conflicto por vía diplomática.

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