La industria del Mercosur reclama formalizar participación en el bloque

El evento “El camino a la integración productiva regional. Balance y desafíos a 30 años del MERCOSUR”, organizado por la Unión Industrial Argentina, congregó a las entidades fabriles de los cuatro países, entre los que se coincidió en generar una agenda común que trascienda los Gobiernos.

El titular de la UIA, Miguel Acevedo, destacó la necesidad de "intensificar el comercio" entre los países miembros del Mercosur, con especial atención en la industria 4.0, más allá de "los acuerdos sectoriales" que se alcancen como bloque económico regional. “Habrá desacople en el crecimiento, que se dará a distintas velocidades en relación con las principales economías.

Al inicio de su ponencia, señaló que "los 30 años del Mercosur nos encuentran en un momento muy particular, con una crisis sanitaria que golpea fuertemente a toda la región. Y en este contexto nos enfrentamos con nuevos desafíos". Acevedo manifestó que el marco es de "un Mercosur debilitado, con muchas dificultades para coordinar políticas y estrategias, a fin de hacer frente a este panorama".

"No sólo por cuestiones técnicas, sino porque no se han logrado resolver las cuentas pendientes en materia de desarrollo, y tampoco seguimos una estrategia como bloque", opinó. Sin embargo, señaló que “el consejo industrial del Mercosur trabaja para aunar diagnósticos y repensar al bloque como una plataforma de desarrollo regional: pensar en la industria, dinamizar empleo, exportaciones e innovación".

Por su parte, el titular de la Unión Industrial Paraguaya, Enrique Duarte Luraghi, reclamó apoyo del sector político, para afrontar los problemas comunes de desempleo, informalidad, baja tasa de protección social. Pidió políticas industriales comunes en el bloque para insertarse en las grandes cadenas de valor. También se refirió a "las políticas que restringen las exportaciones entre los miembros. Hoy tenemos las trabas paraarancelarias que está poniendo el gobierno argentino, como en otros momentos las puso el gobierno brasileño". Más adelante, Duarte abordó el problema más serio de Paraguay, que es el contrabando, que está "socavando la economía paraguaya y generando economía ilegal y lavado de dinero".

El presidente de CIU, Alfredo Antía señaló que “Como industriales, aspiramos a unir nuestra energía a favor de ese desarrollo y contribuir así a la palanca que empuje a nuestras comunidades al mañana. Allí tenemos un rol muy importante a jugar. Tenemos en el capital humano nuestra primera fortaleza, debemos unirla a las políticas públicas que generen el entorno adecuado a la inversión y el desarrollo".

El presidente de CIU precisó que “ese nuevo rumbo debe conducirnos hacia un MERCOSUR posible, no ideal, mejorando y consolidando aquellos aspectos del proceso en los que se recogen avances”. Y declaró que, “desde la Cámara de Industrias del Uruguay, en acción compartida con las entidades colegas del Bloque regional, hoy, a 30 años, bregamos por valorar lo que tenemos, e ir por la efectiva consolidación de una zona de libre comercio regional, buscando optimizar el comercio, reducir las restricciones, brindar más certezas para los operadores, más convergencia regulatoria y facilitación del comercio”.

El presidente de la Confederación Nacional de la Industria de Brasil, Robson Braga de Andrade, destacó que el Mercosur es el principal acuerdo firmado por este país en los últimos años, con ingentes beneficios para su país, que de 2011 a 2020, exportó US$ 54,9 mil millones más de lo que importó de otras naciones del grupo, con una agenda exportadora diversificada, tanto en productos industriales como en alimentos, y generando 35.000 puestos de trabajo por millón de reales exportados. Sin embargo, el bloque representa el 17% del comercio total de los cuatro países. Por otro lado, puntualizó que Brasil y Argentina están por detrás de los 18 principales competidores internacionales, por problemas de tributación y financiamiento. El líder empresario propuso trabajar sobre acuerdos internacionales, y promover el libre comercio intrabloque con la supresión de barreras no tarifarias, con la internalización de normas pendientes, como las relativas a las compras gubernamentales.

Declaración con reclamos concretos

En la Declaración por los 30 años del Mercosur que se presentó en el encuentro, los titulares de la Unión Industrial Argentina, Consejo Industrial Brasil (CNI), Cámaras de Industrias Uruguay (CIU), y la Unión Industrial Paraguaya (UIP), los líderes empresariales detallaron cinco reclamos, con especial atención a potenciar la participación del sector privado en el MERCOSUR. Propone crear un mecanismo de participación efectiva del sector empresarial en el proceso de toma de decisiones del MERCOSUR en materia económica y comercial, para contribuir a las decisiones de los gobiernos de los Estado Parte. La idea es la de contribuir en temas fundamentales para el proceso de integración como temas tarifarios, reglas de origen, convergencia regulatoria y las negociaciones comerciales externas, así como facilitar la implementación de los resultados que se alcancen.

En el punto 6 del documento, el Consejo reclama específicamente “no adoptar ninguna decisión que implique modificar o revisar el Arancel Externo Común y/o el Régimen de Origen del MERCOSUR sin conocer ni dar oportunidad al sector empresarial y privado en general para expresar su opinión. Para poder opinar, se requiere transparencia sobre el proceso de revisión, recibir la información necesaria al respecto y el resultado de los estudios en cuanto a su impacto esperado”.

La Declaración también sugiere a los gobiernos del Mercosur, establecer las condiciones para impulsar la estabilidad y el crecimiento económico; asumir e implementar compromisos que hagan realidad el libre comercio intra-bloque, para hacer “realidad la libre circulación de bienes y servicios que proclama el Tratado de Asunción”. También pide estimular la aproximación y la convergencia regulatorias. con el reconocimiento mutuo de registros y certificaciones, reduciendo barreras no arancelarias. Asimismo, el texto se refiere a la necesidad de internalizar reglas y acuerdos pendientes, como por ejemplo, acuerdos en materia de facilitación del comercio y contratación pública.

Acuerdos comerciales y cadenas regionales de valor

El canciller Felipe Solá fue invitado al encuentro de trabajo, para revisar el estado de las diversas negociaciones externas que mantiene el bloque, como así también los problemas para acceder a nuevos mercados.

En su intervención, al caracterizar al Mercosur como una plataforma de desarrollo económico y de inserción internacional, el canciller Solá destacó la red de acuerdos comerciales que tiene el bloque con América Latina, además de acuerdos de libre comercio con Israel y Egipto, y acuerdos preferenciales con la Unión Aduanera de África del Sur e India. Además recordó que “mantenemos tratativas de distinto grado de avance con once países o grupos de países, entre ellos Canadá, Corea del Sur, Singapur, Israel y Líbano”.

Con relación a los acuerdos con la UE y la EFTA, aclaró que “están prácticamente cerrados pero no avanzan y no es por responsabilidad del Mercosur”. Estos acuerdos “han implicado un cambio de mentalidad, y en esto la Argentina ha puesto mucho sobre la mesa. Cuando llegue (el acuerdo Mercosur - UE) lo enviaremos a nuestro Parlamento con la voluntad de que se apruebe. Hay que respetar el trabajo hecho, aunque el cierre fue apurado. Finalmente ahí estamos, y ese convenio abre la puerta de otros”, declaró el ministro.

El jefe diplomático consideró que la revisión del AEC debe ser “pragmática y racional” y “deberá siempre tener como horizonte que una mayor competitividad no implique socavar nuestras economías y nuestro empleo”. Aclaró además que, ante la transformación de las economías y el comercio internacional como efecto de la pandemia, dicha revisión debe apostar a la asociación regional.

Cadenas regionales de valor

“Frente al decaimiento o retroceso de las cadenas de valor global hay que buscar aumentar la potencia de las cadenas de valor regional, y eso supone mayor integración. Somos mucho más fuertes para abrirnos si estamos juntos. El principio de integración siempre tiene que estar presente frente al principio de apertura”, remarcó. “El bloque tiene la obligación de admitir que hay fluctuaciones y cambios muy fuertes, y que debe abordarlos y sortearlos”, subrayó. Y agregó que “los desafíos son para todo el bloque” y que hay que “estar dispuestos a ponernos en los zapatos del otro”.

Reconoció también que “las asimetrías estructurales existen” dentro del bloque y mencionó la importancia del Fondo para la Convergencia Estructural del Mercosur (FOCEM), como un mecanismo frente a la necesidad de redistribuir los costos y beneficios de la integración, pero que “no basta para nivelar”.

El jefe del Palacio San Martín llamó además a reactivar la diplomacia multisectorial, bajo liderazgo de la Nación.

Texto completo Declaración CIM

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