NADIE PUEDE SOLO
Este concepto, reiterado por el Papa Francisco, constituye una base sustantiva de la vida humana. En consecuencia de los pueblos, de los países. Hay intereses sociales, colectivos, que lo hacen obvio. Pero hay intereses financieros, políticos, estructurales que lo hacen peligroso, casi diría, enemigo.
Las políticas coloniales expresadas en esos intereses desde la épocas de nuestras independencias latinoamericanas, pusieron especial atención en dividirnos y hasta enfrentarnos entre países y principios diferentes.
El Mercosur, desde su nacimiento después de las dictaduras, hace 30 años, aspiró a sumar esfuerzos conscientes acerca de que nadie puede solo.
Cuando el mundo se volcó a agudizar las políticas de mercado y de concentración financiera, con niveles de pobreza sorprendentes, como en la época de la colonia, los grandes intereses comenzaron a intensificar las acciones para la destrucción de las alianzas sensibles a los intereses de los pueblos.
Personalmente tuve la fortuna de contribuir desde mis funciones en la Cancillería Argentina, a organizar lo que terminó siendo el Foro Social del Mercosur con miles de organizaciones como miembros activos. Hoy se está intentando reorganizar lo que el Mercosur de los últimos años destruyó.
Y también tuve la fortuna de encabezar lo que el ámbito social reclamaba para el Mercosur: La Integración Productiva, esto era la asociatividad, las cadenas de valor a través de las fronteras en sus primeros pasos estructurales.
Fue una época, hace unos 15 años, medio Mercosur, en que la solidaridad y la acción común impidieron la conformación del ALCA que nos definía en un grado de dependencia de los grandes poderes como en el período de la colonia.
Hoy en plena pandemia, todo aflora, nunca se vio tan claro a nivel universal que nadie puede solo.
El Sur con el Sur deben generar la fuerza que impulse el equilibrio. Me refiero al sector público, al productivo, al social, al académico, a la articulación imprescindible que la emergencia reclama. Humildemente desde la Cátedra Sur Sur de la Universidad de Buenos Aires y la Organización de las Naciones Unidas con la vista puesta en la Agenda 2030 aspiramos a contribuir a esta articulación esencial.
Si logramos recuperar la salud, debemos obtener la salud social y el Mercosur como símbolo y como instrumento deberá ser profundamente cómplice en dichos esfuerzos.
Hugo Varsky. Coordinador de la Cátedra Sur Sur UBA-ONU
