Unasur designa presidente y directorio del Banco del Sur

El presidente ejecutivo Pedro Buonomo, procurará recuperar el control de los excedentes financieros regionales para aplicarlos al desarrollo de los países.


En una reunión reservada en la sede de la Unión de Naciones Sudamericanas, entró en funciones el primer directorio del Banco del Sur. En un comunicado oficial, la cancillería de Ecuador señaló que el Banco del Sur “inicia su fase preoperativa abriendo sus cuentas en Suramérica, las cuales captarán, al término del primer año, 90 millones de dólares de capital en efectivo”.

En el encuentro también se aprobó el Reglamento del Directorio que contiene las responsabilidades y normas operativas del banco, y se acordó que el directorio se reunirá de manera periódica para implementar todo el cuerpo normativo de la institución.

“El Directorio pretende constituir al Banco del Sur como un puntal de la nueva arquitectura financiera regional que enfrentará las restricciones externas con alianzas con otros bloques regionales y bancos de desarrollo a nivel global”, señala el texto publicada en la página web de la Cancillería.

Buono es un economista con más de 25 años de experiencia en gestión financiera pública y privada y realizó sus estudios de postgrado en la Universidad de Harvard, en Estados Unidos. Se desempeñó como asesor del presidente uruguayo José Mujica, y ejerció el cargo de presidente de la Corporación Nacional para el Desarrollo, así como el de viceministro de Economía y Finanzas de Uruguay.

El compromiso en los primeros cinco años es que los países más grandes, Brasil, Argentina y Venezuela, aporten 2 mil millones, cada uno. A Ecuador y Uruguay les corresponde un ingreso de $ 400 millones y Bolivia y Paraguay entregarán 100 millones. No sólo para desarrollar la competitividad a través de infraestructura, sino también de la complementación tecnología para avanzar en la matriz productiva regional.

En entrevista con CELAG, Buonomo se refirió a los desafíos económicos del Banco del Sur para el año 2017

 “Si consideramos que siete presidentes progresistas del continente firmaron el Acuerdo Constitutivo del Banco del Sur hace nueve años, el tiempo que ha transcurrido para concretar la instalación del Directorio Ejecutivo, muestra que el proceso político realizado se puede calificar al menos como complejo. La situación política y económica de la región es diferente a la que existía hace 9 años, y es clave tener un adecuado diagnóstico de la misma a la hora de definir la estrategia de desarrollo del Banco del Sur. El Banco del Sur se define como banca de desarrollo de un nuevo tipo que se propone financiar proyectos de los países de la región con un enfoque en el fortalecimiento de las soberanía en sus diferentes dimensiones: alimentaria, energética, de la salud, del conocimiento y de los recursos naturales; y desde el punto de vista monetario potenciar las monedas nacionales para contribuir a la creación de un sistema monetario regional, afirmó.

“Con esta visión estratégica fue concebido el Banco y hacia ese objetivo debe transitar. Sin perjuicio de ello la realidad política y económica y las condiciones en el que proyecto comienza a trabajar determinan la necesidad de definir algún tipo de prioridades de corto plazo.

En este sentido y específicamente en referencia al año 2017 podemos destacar algunas líneas de acción concretas. En términos institucionales, se deberá empezar la etapa pre operativa que culminará con la instalación de la sede del Banco en la ciudad de Caracas. Esa etapa, que se pretende llevar a cabo en los primeros 90 días de trabajo del Directorio Ejecutivo, implica culminar los trabajos en términos del diseño de normas, procesos y procedimientos que regularán la actuación de la institución, así como la estructura organizacional requerida.

En términos de proyectos, el Banco pretende avanzar en la cartera regional de infraestructura priorizada por el Cosiplan en el marco de UNASUR. Existe una cartera de proyectos de infraestructura que incorporan a 3 o más países de la región, y que han sido definidos como claves para avanzar en la integración física, elemento imprescindible para fortalecer el impostergable proceso de integración productiva regional. Si la región no avanza en este camino seguiremos reproduciendo el rol de proveedor de materias primas a través de nuestros recursos naturales al sistema económico global. De allí lo clave de comenzar por los trabajos de preinversión que requieren estos proyectos, cuyas características necesitan la participación de una banca de desarrollo que priorice los objetivos de largo plazo.

Y en términos estratégicos el Banco deberá ir encontrando su lugar entre otras instituciones de la región y con otras de otras regiones. Se deberá buscar acuerdos y complementación con otras instituciones, así como ir incorporando a los otros países de UNASUR a través del desarrollo de instrumentos específicos que permitan su participación en proyectos regionales”.

Preguntado por la forma en que el Banco podría sostener las políticas públicas que satisfacen derechos sociales con la actual restricción externa en los procesos de cambio de América latina, Buonomo explicó que “la región se encuentra en un momento de restricción externa en términos económicos y políticos. La correlación de fuerzas no es la misma que cuando en la primera década del siglo hubo avances sustanciales en el acceso a derechos sociales de sectores históricamente postergados, a través de políticas públicas que permitieron canalizar partes significativas del excedente económico recuperado. De igual manera el entorno económico internacional es notoriamente más hostil. Basta mirar la caída de precios de nuestros productos exportables, en particular el petróleo.

 En este contexto el rol de un banco de desarrollo de nuevo tipo adquiere un carácter determinante. La agenda pendiente de modificación de la estructura productiva que apunte al fortalecimiento de la soberanía de los países de la región se hace imprescindible. Será clave una visión diferente en el financiamiento del proceso de cambio estructural necesario y el desafío del Banco del Sur será prepararse para contribuir a este requerimiento.

 Los avances sociales deben ser sostenidos por los protagonistas del proceso de cambios, son ellos los que defenderán las conquistas alcanzadas más allá de eventuales riesgos que aparecen cuando la correlación de fuerzas cambia. El Banco del Sur fue concebido como un instrumento para la defensa y profundización de estas conquistas. En el marco de las referidas restricciones se deberán encontrar los mejores mecanismos para cumplir ese rol.


 Las relaciones con los BRICS y otros enclave geoeconómicos

“En un mundo de bloques los países de América Latina requieren de institucionalidades comunes en las diferentes dimensiones, a efectos de establecer relaciones con el resto del mundo. A nivel financiero es necesario un Banco que nos represente con una visión diferente a la de las instituciones que tienen con una visión más ortodoxa de la globalización y las relaciones entre los países. Una institución que más allá de gobiernos específicos proyecte con una alternativa regional.

 América Latina tiene depositados más de un millón de millones de dólares en el resto del mundo, 75% en EEUU, a pesar de la urgencia financiera que atravesamos. La nueva arquitectura financiera en la que se inserta el Banco del Sur tiene como objetivo estratégico recuperar ese ahorro de la región para que se pueda invertir en proceso de desarrollo de nuestros países. Esta tarea de convencimiento hacia nuestros propios gobiernos e instituciones para que una parte importante de nuestros recursos quede en la región, es uno de los principales desafíos.

 Los europeos tienen el Banco Europeo de Inversiones. Los asiáticos acaban de crear el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura. Y quizás, más importante, los BRICS acaban de crear el Nuevo Banco de Desarrollo con el mismo objetivo. Todas estas instituciones están pensadas con una visión estratégica similar al Banco del Sur, recuperar el control de los excedentes financieros de las regiones para canalizarlos en el desarrollo de los países. Existe un claro convencimiento en cuanto a los efectos perniciosos de la globalización financiera para el desarrollo de los países de estas regiones del mundo.

Esta situación abre oportunidades de trabajo conjunto, cooperación y complementación entre las instituciones. Para el Banco del Sur será una prioridad estratégica estrechar vínculos con estas instituciones, compartir visiones y objetivos y avanzar en el diseño de instrumentos que permitan potenciar el trabajo de todas. Sin duda, es una estrategia clave y en esta primera etapa del Banco se le otorgará una especial prioridad.

En cuanto al escenario actual que enfrentará el Banco del Sur, el economista explicó que “la entidad comenzará con un proceso de capitalización paulatino que demandará varios años antes de llegar a cifras significativas en relación a los 20.000 millones de dólares de su capital autorizado. Esta realidad no debe menospreciar el hecho de que luego de un intenso proceso de varios años el Banco se ha establecido formalmente, y ha plantado bandera en un contexto político desfavorable, si lo comparamos con la situación existente cuando se firmó el acuerdo constitutivo en 2006.

 Si bien entonces, la potencialidad del Banco en esta etapa inicial estará acotada por sus limitaciones patrimoniales, su presencia indica la posibilidad de actuar en el ámbito financiero regional con una visión diferente. Una visión que como establece su acta fundacional apunte a el fortalecimiento de la soberanía de nuestros países, en particular la soberanía monetaria.

 El desafío será encontrar los mecanismos e instrumentos que contribuyan a fortalecer las estrategias soberanas de los países”, concluyó.

http://www.celag.org/pedro-buonomo-nuevo-presidente-del-banco-del-sur-el-desafio-es-lograr-que-vuelva-a-casa-buena-parte-del-dinero-que-america-latina-tiene-afuera/

http://www.alainet.org/es/articulo/182171

 
Venezuela rechaza suspensión del Mercosur y reclama presidencia –pro tempore

El gobierno de Venezuela reaccionó indignado el viernes 2 de diciembre, a su suspensión del bloque Mercosur, la más fuerte decisión internacional contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, hasta la fecha.

La cancillería de Argentina informó en un comunicado que Venezuela incumplió el plazo estipulado hasta el primero de diciembre, por el cual debía obtener la aprobación parlamentaria de gran parte de la normativa del Mercosur. Los cancilleres de los cuatro países fundadores del bloque: Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, notificaron a Venezuela sobre la decisión en una carta.

Mercosur aceptó a Venezuela como miembro en 2012, en otro contexto político regional.

El texto de la carta de los cancilleres del Mercosur, explica que la suspensión “tiene su fundamento en la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados, tanto en carácter de principio general del derecho como en su condición de norma consuetudinaria, fue decidida por los Cancilleres de los Estados Partes signatarios del Tratado de Asunción en la “Declaración Conjunta Relativa al Funcionamiento del MERCOSUR y al Protocolo de Adhesión de la República Bolivariana de Venezuela”, adoptada el 13 de septiembre de 2016.
 

En efecto, en este instrumento se estableció que el 1ro de diciembre de 2016 se analizaría nuevamente el estado de cumplimiento de las obligaciones asumidas por la República Bolivariana de Venezuela en el Protocolo de Adhesión al MERCOSUR de ese país y que la persistencia del incumplimiento, a partir de esa fecha, importaría el cese del ejercicio de los derechos inherentes a su condición de estado Parte.

En el día de ayer se analizó el estado de cumplimiento de las obligaciones asumidas por Venezuela, constatándose el estado de incumplimiento.
Cabe destacar que Venezuela contó con cuatro años para incorporar la normativa vigente del MERCOSUR y que se le otorgó un plazo adicional para honrar sus obligaciones, que finalizó el 1 de diciembre de 2016 y que la medida adoptada regirá hasta que los Estados Partes signatarios del Tratado de Asunción convengan con ese país las condiciones para restablecer el ejercicio de sus derechos como Estado Parte.

La reacción del gobierno de Caracas a través de su canciller Delcy Rodríguez fue inmediata, en una serie de mensajes en su cuenta de Twitter, la jefe de la diplomacia venezolana, desmintió la suspensión, calificó la decisión de inválida y aseguró que su país seguirá ejerciendo la presidencia del Mercosur con voz y voto.

Las naciones fundadoras del Mercosur alegan que Venezuela ha incumplido requisitos establecidos en el protocolo de adhesión a los que se comprometió al ingresar al bloque. Esos requisitos están relacionados con el comercio, política, democracia y derechos humanos.

A las naciones vecinas de Venezuela también les preocupa crecientemente los acontecimientos en el país petrolero que atraviesa por una difícil situación económica.

En una conferencia de prensa, la canciller Delcy Rodríguez dijo que la sanción del bloque constituye “una agresión a Venezuela de dimensiones realmente muy graves”.

Rodríguez aseguró que la decisión anunciada desde Asunción "no tiene ningún tipo de efecto ni para Venezuela ni para nadie" y responsabilizó a los cancilleres de esos cuatro países de gestar el "golpe de Estado", al tiempo que les acusó de atribuirse facultades que no tienen.

El parlamentario oficialista y segundo al mando del régimen venezolano, Diosdado Cabello, indicó que representantes del Gobierno acudirán a las embajadas de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, en Caracas, para consignar un documento en el cual exigen respeto hacia Venezuela y los estatutos del Mercosur.

Por su parte, los cancilleres del Mercosur produjeron el miércoles 7 de diciembre un  Comunicado Conjunto, que se reproduce a continuación , acerca del Diálogo en Venezuela

Los Cancilleres de los países abajo firmantes reiteran su llamado para mantener vigente el  diálogo en Venezuela entre el gobierno y la oposición.

Destacan, asimismo, la importancia de un trato respetuoso mutuo y del estricto cumplimiento de los acuerdos alcanzados en el marco de dicho diálogo, que son esenciales para generar la confianza necesaria, asegurar la participación permanente de todas las partes y avanzar en la solución de las diferencias en beneficio del pueblo venezolano

Nuestros países seguirán apoyando los esfuerzos de los ex Presidentes y la prudente contribución del Vaticano, que debe ser altamente apreciada por todas las partes y representó una ayuda desinteresada para favorecer el proceso de diálogo en el hermano país.

Hacemos votos para que Venezuela encuentre el camino del entendimiento que le dará estabilidad hacia el futuro.

 

Susana Malcorra

Canciller de Argentina

 

José Serra

Canciller de Brasil

 

Heraldo Benjamín Muñoz Valenzuela

Canciller de Chile

 

María Angela Holguin Cuéllar

Canciller de Colombia

 

Carlos Raúl Morales Moscoso

Canciller de Guatemala

 

Claudia Ruiz Massieu

Canciller de México

 

Eladio Loizaga

Canciller de Paraguay

 

Ricardo Luna

Canciller de Perú

 

Rodolfo Nin Novoa

Canciller de Uruguay

 

 

mercosurabc