Coordinación en foros mundiales
Los ministros de Medio Ambiente del Mercosur debatieron una política regional coordinada hacia 2004, en la primera reunión de ese nivel después de 8 años. En el encuentro, que se realizó el 9 de octubre en Montevideo, los funcionarios alcanzaron la primera postura unificada del bloque de cara a los organismos internacionales.
Por primera vez, a través del representante de Uruguay –país que ejerce actualmente la presidencia pro tempore del bloque-, el bloque del Mercosur expuso una posición unificada, que gira alrededor de la exhortación a la comunidad internacional hacia la puesta en vigor del Protocolo de Quioto.
Otro punto de convergencia expuesto por el delegado en la comisión de medio ambiente de la Asamblea General de Naciones Unidas de New York, fue la importancia concedida a la implementación intra Mercosur de los criterios de desarrollo sustentable y la Convención de Estocolmo sobre Polución Orgánica Persistente.
La coordinación de posiciones del mercado común en los foros internacionales se produce en momentos en que se negocian documentos decisivos para el desarrollo de los países, como el Protocolo de Quioto y el Protocolo de Cartagena sobre Movimiento Transfronterizo de Organismos Genéticamente Modificados o Protocolo de Bioseguridad. Argentina y Brasil son importantes productores mundiales de soja transgénica.
En su proyecto de declaración, los ministros hicieron hincapie en la discusión de la producción "limpia", que implica la utilización de tecnologías productivas menos polucionantes en lo que se refiere a emisiones y residuos en ríos y manantiales subterráneos.
Un importante proyecto de producción "limpia" para pequeñas y medianas empresas, está siendo llevado adelante en Mercosur en cooperación con la agencia alemana de cooperación técnica GTZ, en el marco de un convenio con el gobierno de ese país. Las pymes no están en condiciones de afrontar los gastos que demandan tanto las normas ambientales internacionales que exige la actividad exportadora, como los relacionados con la producción "limpia".
La ejecución del proyecto corresponderá al SGT-6, con la colaboración de los Organismos Ambientales Nacionales de los países del bloque. El aporte de la Deutsche Gesellschaft für Technische Zusammenarbeit (GTZ) comprende asesoría de corto y largo plazo, además de capacitación y provisión de materiales en medida limitada. La expansión de la producción de bienes industriales y agrícolas, aumenta el impacto ambiental derivado del uso de fertilizantes y defensivos.
El Mercosur deberá alcanzar en 2004 un acuerdo de armonización de legislación ambiental, con base en la más avanzada de las preexistentes en los países miembros. La legislación brasileña es la más exigente, con un nivel de demanda de los órganos ambientales sobre la industria que sobrepasa al de Argentina, su principal socio en el bloque.
