Argentina y Brasil lanzaron la Comisión Binacional sobre Temas Antárticos

Durante la reunión se intercambiaron miradas sobre los principales temas que se trataron en la Reunión Consultiva del Tratado Antártico, en Kochi, India, del 20 al 30 de mayo.

Asimismo, se analizaron los puntos más relevantes de otros foros del Sistema del Tratado Antártico (STA), tales como la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos.

Sumado a ello, se pasó revista a la cooperación científica y logística existente entre ambos países, con miras a consolidar y profundizarla.

El Tratado establece que la Antártida se utilizará exclusivamente para fines pacíficos, prohibiendo toda actividad militar y los ensayos de toda clase de armas. Asimismo, resguarda adecuadamente la reivindicación de soberanía argentina en la Antártida frente a los reclamos superpuestos al argentino (es el caso de Gran Bretaña, proyectándose desde el territorio ocupado de Malvinas y el archipiélago sur).

El acuerdo expresamente “ prohíbe cualquier medida de naturaleza militar, incluyendo bases y fortificaciones, maniobras o pruebas de armas en general y es zona libre de armas nucleares”. La única excepción es el uso de personal militar o equipo para investigación científica, logística u otros fines pacíficos.

La implementación de esta comisión se produjo contemporáneamente con las noticias que dieron cuenta de la detección por parte de una expedición científica rusa, de una gran cuenca de petróleo en la zona de la Antártida reclamada por Chile, Argentina y Reino Unido. El gobierno ruso envió la documentación pertinente al trabajo de la misión científica, en la que se detalló el sistema de detección, sin ningún tipo de perforación, que se enmarca en el trabajo autorizado por el Tratado Antártico.

El hallazgo ya había sido registrado en 2020, pero una publicación británica lo difundió recientemente, en momentos en que avanza con el aprovisionamiento de materiales bélicos en las islas Malvinas ocupadas, en lo que se considera funcionará como una base militar de la OTAN. A esto se sumó la visita en el mes de mayo, del portaaviones nuclear de Estados Unidos USS George Washington, para tareas de entrenamiento de la Armada argentina. Todas contravenciones de la declaración del Atlántico Sur como “zona de paz”.