Crisis energética en Argentina: empresas y consumidores
Entre las causas de la actual crisis energética, la ausencia de inversiones necesarias en obras hidroeléctricas y usinas, además del incremento de la demanda de energía de parte de las empresas y usuarios, se pueden contar como las más importantes.
I-Introducción:
El año próximo será uno de los más difíciles para la Argentina en materia de energía. Sabemos que los principales agentes económicos perjudicados serán tanto las empresas para los consumidores y usuarios, lo cual ello nos conduce a saber cuales serán los costos económicos y sociales que sufrirán los mismos, llegando a nuestras consideraciones finales del presente análisis.
II-Causas y motivos de la actual crisis energética. Realidades y contrariedades en el sistema.
Desde el punto de vista económico, toda crisis aduce poseer causas o motivos por los cuales se produjo, constituida como una fase o etapa de los ciclos económicos. En el caso de la energía, podemos sostener que existe una crisis importante, debido a que muchos analistas económicos han manifestado su preocupación por el tema.
Varias son las causas de la actual crisis energética en Argentina y ellas son:
1-La ausencia de inversiones necesarias en obras hidroeléctricas y usinas.
2-El incremento de la demanda de energía de parte de las empresas y usuarios debido a la recuperación de la restricción presupuestaria luego de la profunda etapa de default luego del 2002.
3-El empleo de nuevas tecnologías aplicadas al sector energético, conducirá a la utilización de más capital financiero.
NAVAJAS manifiesta al hacer referencia de la crisis energética que “parte del problema viene de lejos y tiene que ver con la utilización creciente de gas. No hay nada culposo en hacer lo que hicimos en materia de la introducción del gas natural en nuestra economía, sólo que las decisiones descentralizadas fueron demasiado rápido y sin considerar consistencia agregada”.
Se ha considerado que uno de los hechos contundentes de la actual crisis energética ha sido la reversión de incentivos que provocó una parálisis del crecimiento energético, provocando la actual crisis de energía.
Existen posibles soluciones y propuestas para la crisis energética como es el ahorro de la energía, o bien premios y castigos para los usuarios que utilicen de manera irracional el suministro eléctrico. Ninguna de las dos soluciones podrían ser eficientes en un sistema energético en crisis, ya que ello nos llevaría a un agravamiento de la situación actual del servicio. Además de provocar serios costos económicos y sociales a los consumidores y usuarios (la parte más débil del consumo), y luego a las empresas también afectadas por la actual crisis energética.
III-Las empresas y la crisis energética – El aumento de tarifas como posible salida a la crisis.
Las empresas constituyen una organización económica de importancia dentro de la economía. Se estima que para el año 2007, la crisis energética afectará seriamente a las empresas reflejando como una de las principales dudas en el sector de los precios y las tarifas. Debido al nuevo “Plan de Energía Plus”, las empresas cargan con mayores costos económicos lo que conduce al sector empresario, a sostener que dichos costos podrían ser compartidos con aquellos usuarios que posean mayor restricción presupuestaria.
El ajuste de tarifas en el servicio eléctrico sería uno de los posibles reclamos de los empresarios, dirigido solamente hacia aquellos usuarios que revisten un “poder adquisitivo cómodo”. Pero ello no sería un óptimo de Pareto, es decir, que habrían ciertos desequilibrios entre los consumidores y usuarios, ya que una parte de ellos cargarían con los costos económicos que enfrentan las empresas, con lo cual se determinarían externalidades negativas, empeorando a una de las partes como son aquellos usuarios que tienen una situación presupuestaria cómoda, y no tendrán una garantía de que tendrán un suministro eléctrico eficiente.
Se considera que el futuro de la actual crisis energética en Argentina no es positivo, por el contrario, se han anticipado posibles dificultades en el suministro del servicio principalmente en la zonas de Cuyo, el Litoral y en la provincia de Córdoba. Las industrias serán las más afectadas por los prolongados cortes de energía que sufrirán durante el año 2007, ya que son justamente las que poseen servicio interrumpible.
Debemos recordar que no se han construido nuevas centrales eléctricas desde hace 5 años, es por ello que ahora el costo económico y social lo pagan los consumidores –usuarios y las empresas. De haberse invertido eficientemente en dichas obras, no se estaría padeciendo quizás la actual crisis energética.
IV-El sistema de energía eléctrica en los Estados Unidos – la contracara del actual sistema energético argentino.
El sistema energético en los Estados Unidos parecería ser la contracara del actual sistema energético argentino. Sin embargo, el sistema energético americano teniendo al frente a General Electric, ha padecido también sus externalidades negativas tales como la crisis del transporte aéreo suscitada por el conflicto bélico que mantiene con Irak después de 2001, y la caída de la empresa ENRON que hizo tambalear al sector energético americano.
Se considera que General Electric es una de las empresas más importantes del capitalismo estadounidense y es considerado como el mayor conglomerado del mundo; dicho conglomerado se ha introducido a través de sus estrategias en la inserción de diversos sectores del mercad, tales como el alquiler de aviones, u otorgamiento de créditos al consumo.
En cuanto a las relaciones sociales, General Electric fue pionera en este aspecto, ya que durante la gran depresión entre 1922 y 1940, no recurrió a despidos masivos de los trabajadores de la empresa, estableciéndose un modelo fordista basado en una redistribución de las riquezas producidas entre los asalariados. El poder adquisitivo sostuvo en los últimos tiempos las ventas de la economía estadounidense.
Actualmente la empresa estadounidense General Electric concentró sus gestiones financieras de sus activos, motivo por el cual el dinero dejó de estar disponible para el desarrollo de actividades industriales. Una de las consecuencias contundentes ha sido la actitud especulativa que la propia empresa había incurrido en la década de los 90, ya que había disminuido sus inversiones en el desarrollo de la investigación.
Esto nos llevaría a pensar que tampoco el actual régimen energético estadounidense es del todo perfecto y que siempre en toda empresa y en todo ciclo económico acontecen externalidades negativas que pueden ser revertidas, siempre que se apliquen las políticas de incentivos apropiadas al sistema, reduciendo costos económicos y sociales y un óptimo funcionamiento del abastecimiento de energía.
A modo de conclusión:
La inversión es una herramienta clave en la actual crisis argentina, teniendo en cuenta, que dichas inversiones debieron se efectuadas en obras desde hace tiempo y no ahora, ya que los plazos son cortos y los proyectos de construcción de usinas son a largo plazo. Solo cabe esperar lo que sucederá durante el año 2007, que se avecina quizás con una crisis energética difícil, pero no imposible de superar si se aplican políticas de inversión apropiadas, eficientes y de bajo costo.
(*) Jefa de Trabajos Prácticos de la cátedra Análisis Económico y Financiero – Jefa de Trabajos Prácticos de la cátedra Elementos de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Buenos Aires – Master en Derecho y Economía (tesis en curso). Universidad de Buenos Aires – Facultad de Derecho.
El año próximo será uno de los más difíciles para la Argentina en materia de energía. Sabemos que los principales agentes económicos perjudicados serán tanto las empresas para los consumidores y usuarios, lo cual ello nos conduce a saber cuales serán los costos económicos y sociales que sufrirán los mismos, llegando a nuestras consideraciones finales del presente análisis.
II-Causas y motivos de la actual crisis energética. Realidades y contrariedades en el sistema.
Desde el punto de vista económico, toda crisis aduce poseer causas o motivos por los cuales se produjo, constituida como una fase o etapa de los ciclos económicos. En el caso de la energía, podemos sostener que existe una crisis importante, debido a que muchos analistas económicos han manifestado su preocupación por el tema.
Varias son las causas de la actual crisis energética en Argentina y ellas son:
1-La ausencia de inversiones necesarias en obras hidroeléctricas y usinas.
2-El incremento de la demanda de energía de parte de las empresas y usuarios debido a la recuperación de la restricción presupuestaria luego de la profunda etapa de default luego del 2002.
3-El empleo de nuevas tecnologías aplicadas al sector energético, conducirá a la utilización de más capital financiero.
NAVAJAS manifiesta al hacer referencia de la crisis energética que “parte del problema viene de lejos y tiene que ver con la utilización creciente de gas. No hay nada culposo en hacer lo que hicimos en materia de la introducción del gas natural en nuestra economía, sólo que las decisiones descentralizadas fueron demasiado rápido y sin considerar consistencia agregada”.
Se ha considerado que uno de los hechos contundentes de la actual crisis energética ha sido la reversión de incentivos que provocó una parálisis del crecimiento energético, provocando la actual crisis de energía.
Existen posibles soluciones y propuestas para la crisis energética como es el ahorro de la energía, o bien premios y castigos para los usuarios que utilicen de manera irracional el suministro eléctrico. Ninguna de las dos soluciones podrían ser eficientes en un sistema energético en crisis, ya que ello nos llevaría a un agravamiento de la situación actual del servicio. Además de provocar serios costos económicos y sociales a los consumidores y usuarios (la parte más débil del consumo), y luego a las empresas también afectadas por la actual crisis energética.
III-Las empresas y la crisis energética – El aumento de tarifas como posible salida a la crisis.
Las empresas constituyen una organización económica de importancia dentro de la economía. Se estima que para el año 2007, la crisis energética afectará seriamente a las empresas reflejando como una de las principales dudas en el sector de los precios y las tarifas. Debido al nuevo “Plan de Energía Plus”, las empresas cargan con mayores costos económicos lo que conduce al sector empresario, a sostener que dichos costos podrían ser compartidos con aquellos usuarios que posean mayor restricción presupuestaria.
El ajuste de tarifas en el servicio eléctrico sería uno de los posibles reclamos de los empresarios, dirigido solamente hacia aquellos usuarios que revisten un “poder adquisitivo cómodo”. Pero ello no sería un óptimo de Pareto, es decir, que habrían ciertos desequilibrios entre los consumidores y usuarios, ya que una parte de ellos cargarían con los costos económicos que enfrentan las empresas, con lo cual se determinarían externalidades negativas, empeorando a una de las partes como son aquellos usuarios que tienen una situación presupuestaria cómoda, y no tendrán una garantía de que tendrán un suministro eléctrico eficiente.
Se considera que el futuro de la actual crisis energética en Argentina no es positivo, por el contrario, se han anticipado posibles dificultades en el suministro del servicio principalmente en la zonas de Cuyo, el Litoral y en la provincia de Córdoba. Las industrias serán las más afectadas por los prolongados cortes de energía que sufrirán durante el año 2007, ya que son justamente las que poseen servicio interrumpible.
Debemos recordar que no se han construido nuevas centrales eléctricas desde hace 5 años, es por ello que ahora el costo económico y social lo pagan los consumidores –usuarios y las empresas. De haberse invertido eficientemente en dichas obras, no se estaría padeciendo quizás la actual crisis energética.
IV-El sistema de energía eléctrica en los Estados Unidos – la contracara del actual sistema energético argentino.
El sistema energético en los Estados Unidos parecería ser la contracara del actual sistema energético argentino. Sin embargo, el sistema energético americano teniendo al frente a General Electric, ha padecido también sus externalidades negativas tales como la crisis del transporte aéreo suscitada por el conflicto bélico que mantiene con Irak después de 2001, y la caída de la empresa ENRON que hizo tambalear al sector energético americano.
Se considera que General Electric es una de las empresas más importantes del capitalismo estadounidense y es considerado como el mayor conglomerado del mundo; dicho conglomerado se ha introducido a través de sus estrategias en la inserción de diversos sectores del mercad, tales como el alquiler de aviones, u otorgamiento de créditos al consumo.
En cuanto a las relaciones sociales, General Electric fue pionera en este aspecto, ya que durante la gran depresión entre 1922 y 1940, no recurrió a despidos masivos de los trabajadores de la empresa, estableciéndose un modelo fordista basado en una redistribución de las riquezas producidas entre los asalariados. El poder adquisitivo sostuvo en los últimos tiempos las ventas de la economía estadounidense.
Actualmente la empresa estadounidense General Electric concentró sus gestiones financieras de sus activos, motivo por el cual el dinero dejó de estar disponible para el desarrollo de actividades industriales. Una de las consecuencias contundentes ha sido la actitud especulativa que la propia empresa había incurrido en la década de los 90, ya que había disminuido sus inversiones en el desarrollo de la investigación.
Esto nos llevaría a pensar que tampoco el actual régimen energético estadounidense es del todo perfecto y que siempre en toda empresa y en todo ciclo económico acontecen externalidades negativas que pueden ser revertidas, siempre que se apliquen las políticas de incentivos apropiadas al sistema, reduciendo costos económicos y sociales y un óptimo funcionamiento del abastecimiento de energía.
A modo de conclusión:
La inversión es una herramienta clave en la actual crisis argentina, teniendo en cuenta, que dichas inversiones debieron se efectuadas en obras desde hace tiempo y no ahora, ya que los plazos son cortos y los proyectos de construcción de usinas son a largo plazo. Solo cabe esperar lo que sucederá durante el año 2007, que se avecina quizás con una crisis energética difícil, pero no imposible de superar si se aplican políticas de inversión apropiadas, eficientes y de bajo costo.
(*) Jefa de Trabajos Prácticos de la cátedra Análisis Económico y Financiero – Jefa de Trabajos Prácticos de la cátedra Elementos de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Buenos Aires – Master en Derecho y Economía (tesis en curso). Universidad de Buenos Aires – Facultad de Derecho.
Andrea F. Mac Donald