Federación Rusa/ Argentina. Acuerdos energéticos, espaciales, tecnológicos y financieros
Un acuerdo de Enarsa con su contraparte rusa; la UIA con la Unión de Industriales y Empresarios Rusos; la CAC con la Cámara de Comercio e Industria de Rusia; el Consejo Empresario Argentino Ruso con la Cámara Argentina de Comercio Ruso Argentino y otro del Banco Nación con el Banco de Rusia para el financiamiento de exportaciones argentinas a ese país. Algunos de los resultados de la misión presidencial, en la que se firmaron además convenios en el área espacial, de transporte e infraestructura y de comercio. Una declaración de asociación estratégica dio el marco político a un viaje en el que la primera mandataria acudió acompañada por funcionarios de primera línea.
El viaje de Cristina Kirchner a Moscú, acompañada por una misión empresaria multisectorial y funcionarios de gobierno de primera línea, produjo varios resultados, considerados de gran importancia, en tanto involucran acuerdos relacionados con recursos estratégicos.
El principal convenio lo constituyó el memorando de entendimiento refrendado entre la estatal Enarsa y la petrolera Lukoil, que según explicó el ministro de Planificación Federal Julio de Vido, en Moscú, se trata de un convenio marco amplio, que comenzará con la construcción por parte de la compañía rusa, de una planta de almacenamiento de combustibles en Campana, además del compromiso de proveer gas oil y fuel oil a la Argentina por cinco años.
Los demás acuerdos incluyeron la firma de memorandum de entendimiento para la participación de empresas rusas en la licitación de subcontratos de costrucción del Ferrocarril Trasandino y en la licitación de la electrificación de la línea San Martín; con la empresa de energía Rosnef para el transporte por barco y eventualmente la provisión de gas natural licuado; otro entre Rusatom y la argentina CNEA (Comisión Nacional de Energía Atómica) para la eventual participación en la construcción de una cuarta central nuclear en la Argentina, un proyecto oficial de largo plazo.
En una reunión con su par ruso, Dmitri Medvedev, la mandataria argentina, en el momento de firmar en el Kremlin la Declaración Conjunta de Asociación Estratégica entre ambos países, señaló la necesidad de "multiplicar en diez o quince veces más" la relación bilateral. El documento incluye el primer reconocimiento de Argentina reconocerá, al derecho de la Federación Rusa a integrar la Organización Mundial de Comercio.
La jefa de Estado argentina reafirmó que los acuerdos firmados "van a acentuar y profundizar una relación que no sólo quiere ser comercial", sino que abogó para que también exista una "articulación de políticas y de cosmovisiones acerca de cómo se deben desarrollar las relaciones internacionales en materia no sólo económica sino también política".
Por su parte, el presidente ruso remarcó que "la cooperación comercial es el pilar de una cooperación bilateral" y recordó que "en los últimos años hemos experimentado cifras de intercambios comercial alrededor de 1500 millones dólares".
En su discurso, Cristina Fernández pidió "sustituir la noción de subordinación por la de cooperación" entre las naciones, y afirmó que la "asociación estratégica responde a este concepto de cooperación y asociatividad productiva y tecnológica".
"Esta profundización de la relación debe darse en un nuevo concepto de las relaciones internacionales. Hasta ahora los países centrales imponían políticas en lo económico, como en materia de seguridad, que debían ser aceptadas por el resto del mundo, pero esto no funcionó y hoy los resultados deberán ser pagados en escala planetaria", agregó.
Al referirse a la crisis financiera internacional, la mandataria afirmó que Argentina y Rusia no habían sido responsables, sino que "por el contrario" esos países contribuyeron al crecimiento de la economía mundial, "con un PBI más que virtuoso en la última década".
"Esto que estamos haciendo aquí es una nueva forma de entender la asociación entre países en un mundo que deberá ser multipolar, multilateral, y reformular sus reglas en materia económica, monetaria, y de seguridad internacional", dijo y pidió que esas reglas "sean aplicables a todos y todos deban respetarlas".
Por su parte, el presidente Medvedev comentó que entre otros planes se busca "desarrollar nuestra cooperación en el gas y la construcción de un nuevo gasoducto que pasará por el territorio de Argentina y Bolivia".
Para el canciller Jorge Taiana, los resultados de la visita a Rusia fueron incluso mejores de los previstos, según lo declaró al volver del viaje con la comitiva presidencial. El canciller definió a la Argentina como un global trader, comercia con muchísimos países del mundo, tanto en sus commodities tradicionales como en sus productos industriales. Mantener abiertos los mercados es por supuesto una tarea que aún es más necesaria cuando hay países que están en proceso de recesión, como son los países desarrollados. “Así que con esta política exterior muy activa continuamos impulsando nuestros productos y a nuestros empresarios”, agregó. En la misma oportunidad, Taiana informó que la semana próxima la Federación Rusa enviará el convenio que determina la supresión de visas entre los dos países para que sea firmado por las autoridades argentinas, y remarcó que la decisión facilitará el turismo y la actividad comercial con ese país.
Un mes atrás, el jefe diplomático argentino inauguró la "Cumbre empresarial ruso -argentina" en Buenos Aires, donde destacó ante empresarios de ambos países el crecimiento en el vínculo comercial "en el marco del diálogo MERCOSUR - Rusia, que tiene a la Argentina como uno de los grandes impulsores y anunció "la inminente firma de un convenio de cooperación económica entre la Federación Rusa y los estados parte del MERCOSUR".
Acuerdos petroleros
El ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, aseguró que el memorando de entendimiento que firmó Enarsa con la petrolera Lukoil "es un convenio marco y amplio que arranca con un hecho concreto" al referirse que la compañía rusa construirá una planta de almacenamiento de combustibles en Campana y proveerá gas oil y fuel oil a la Argentina por cinco años.
En el hotel Metropol de Moscú, el ministro De Vido se reunió para la firma con Vagit Alekperov (presidente de Lukoil), Horacio Sambucetti (representante de Pobater) y Exequiel Espinosa (Enarsa), según informó la agencia Telam.
La petrolera rusa Lukoil es la cuarta en el ranking mundial de producción de crudo e invertirá en el país una cifra aproximada de 500 millones de dólares, empezando con 15 millones para la infraestructura de almacenaje de combustible y el desarrollo de un ducto entre la central general Belgrano y la planta.
La megaempresa rusa posee el 1,3 % de las reservas y el 2,3 % de la producción mundial de petróleo y es la sexta compañía privada de hidrocarburos del mundo. La empresa podría asociarse con las compañias argentinas en la exploración off shore en el Mar Argentino, donde ya actúan YPF y Enarsa con una inversión de más de 150 millones de dólares.
La misión multisectorial
La misión empresaria que acompañó a la presidenta Cristina Fernández concentró empresas del sector alimentos, vinos, agroindustria, componentes eléctricos, textiles, carne, cuero, metalúrgicos, turismo, química y laboratorios, software, pesca, autopartes y naval.
El comercio bilateral con Rusia aumentó cuatro veces en los últimos cuatro años; que pasó de 310 millones de dólares estadounidenses intercambiados en 2003 a u$s 1.207 millones en 2007; es decir con un crecimiento del 430 por ciento; y de esa cifra u$s 780 millones correspondieron a exportaciones argentinas, según datos de la Cancillería argentina.
Rusia exhibe indicadores económicos positivos de manera sostenida, con un ritmo de crecimiento anual promedio del 6,2% desde 1999; con un 8,1% de crecimiento en 2007. El crecimiento de su Producto Interno Bruto (PBI) lo ubicó el año pasado en el décimo lugar entre las economías del mundo. Cuenta además con un alto nivel de reservas, que llegan a u$s 262.900 millones, ubicándose en el tercer lugar en el mundo, detrás de China y Japón.
El principal convenio lo constituyó el memorando de entendimiento refrendado entre la estatal Enarsa y la petrolera Lukoil, que según explicó el ministro de Planificación Federal Julio de Vido, en Moscú, se trata de un convenio marco amplio, que comenzará con la construcción por parte de la compañía rusa, de una planta de almacenamiento de combustibles en Campana, además del compromiso de proveer gas oil y fuel oil a la Argentina por cinco años.
Los demás acuerdos incluyeron la firma de memorandum de entendimiento para la participación de empresas rusas en la licitación de subcontratos de costrucción del Ferrocarril Trasandino y en la licitación de la electrificación de la línea San Martín; con la empresa de energía Rosnef para el transporte por barco y eventualmente la provisión de gas natural licuado; otro entre Rusatom y la argentina CNEA (Comisión Nacional de Energía Atómica) para la eventual participación en la construcción de una cuarta central nuclear en la Argentina, un proyecto oficial de largo plazo.
En una reunión con su par ruso, Dmitri Medvedev, la mandataria argentina, en el momento de firmar en el Kremlin la Declaración Conjunta de Asociación Estratégica entre ambos países, señaló la necesidad de "multiplicar en diez o quince veces más" la relación bilateral. El documento incluye el primer reconocimiento de Argentina reconocerá, al derecho de la Federación Rusa a integrar la Organización Mundial de Comercio.
La jefa de Estado argentina reafirmó que los acuerdos firmados "van a acentuar y profundizar una relación que no sólo quiere ser comercial", sino que abogó para que también exista una "articulación de políticas y de cosmovisiones acerca de cómo se deben desarrollar las relaciones internacionales en materia no sólo económica sino también política".
Por su parte, el presidente ruso remarcó que "la cooperación comercial es el pilar de una cooperación bilateral" y recordó que "en los últimos años hemos experimentado cifras de intercambios comercial alrededor de 1500 millones dólares".
En su discurso, Cristina Fernández pidió "sustituir la noción de subordinación por la de cooperación" entre las naciones, y afirmó que la "asociación estratégica responde a este concepto de cooperación y asociatividad productiva y tecnológica".
"Esta profundización de la relación debe darse en un nuevo concepto de las relaciones internacionales. Hasta ahora los países centrales imponían políticas en lo económico, como en materia de seguridad, que debían ser aceptadas por el resto del mundo, pero esto no funcionó y hoy los resultados deberán ser pagados en escala planetaria", agregó.
Al referirse a la crisis financiera internacional, la mandataria afirmó que Argentina y Rusia no habían sido responsables, sino que "por el contrario" esos países contribuyeron al crecimiento de la economía mundial, "con un PBI más que virtuoso en la última década".
"Esto que estamos haciendo aquí es una nueva forma de entender la asociación entre países en un mundo que deberá ser multipolar, multilateral, y reformular sus reglas en materia económica, monetaria, y de seguridad internacional", dijo y pidió que esas reglas "sean aplicables a todos y todos deban respetarlas".
Por su parte, el presidente Medvedev comentó que entre otros planes se busca "desarrollar nuestra cooperación en el gas y la construcción de un nuevo gasoducto que pasará por el territorio de Argentina y Bolivia".
Para el canciller Jorge Taiana, los resultados de la visita a Rusia fueron incluso mejores de los previstos, según lo declaró al volver del viaje con la comitiva presidencial. El canciller definió a la Argentina como un global trader, comercia con muchísimos países del mundo, tanto en sus commodities tradicionales como en sus productos industriales. Mantener abiertos los mercados es por supuesto una tarea que aún es más necesaria cuando hay países que están en proceso de recesión, como son los países desarrollados. “Así que con esta política exterior muy activa continuamos impulsando nuestros productos y a nuestros empresarios”, agregó. En la misma oportunidad, Taiana informó que la semana próxima la Federación Rusa enviará el convenio que determina la supresión de visas entre los dos países para que sea firmado por las autoridades argentinas, y remarcó que la decisión facilitará el turismo y la actividad comercial con ese país.
Un mes atrás, el jefe diplomático argentino inauguró la "Cumbre empresarial ruso -argentina" en Buenos Aires, donde destacó ante empresarios de ambos países el crecimiento en el vínculo comercial "en el marco del diálogo MERCOSUR - Rusia, que tiene a la Argentina como uno de los grandes impulsores y anunció "la inminente firma de un convenio de cooperación económica entre la Federación Rusa y los estados parte del MERCOSUR".
Acuerdos petroleros
El ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, aseguró que el memorando de entendimiento que firmó Enarsa con la petrolera Lukoil "es un convenio marco y amplio que arranca con un hecho concreto" al referirse que la compañía rusa construirá una planta de almacenamiento de combustibles en Campana y proveerá gas oil y fuel oil a la Argentina por cinco años.
En el hotel Metropol de Moscú, el ministro De Vido se reunió para la firma con Vagit Alekperov (presidente de Lukoil), Horacio Sambucetti (representante de Pobater) y Exequiel Espinosa (Enarsa), según informó la agencia Telam.
La petrolera rusa Lukoil es la cuarta en el ranking mundial de producción de crudo e invertirá en el país una cifra aproximada de 500 millones de dólares, empezando con 15 millones para la infraestructura de almacenaje de combustible y el desarrollo de un ducto entre la central general Belgrano y la planta.
La megaempresa rusa posee el 1,3 % de las reservas y el 2,3 % de la producción mundial de petróleo y es la sexta compañía privada de hidrocarburos del mundo. La empresa podría asociarse con las compañias argentinas en la exploración off shore en el Mar Argentino, donde ya actúan YPF y Enarsa con una inversión de más de 150 millones de dólares.
La misión multisectorial
La misión empresaria que acompañó a la presidenta Cristina Fernández concentró empresas del sector alimentos, vinos, agroindustria, componentes eléctricos, textiles, carne, cuero, metalúrgicos, turismo, química y laboratorios, software, pesca, autopartes y naval.
El comercio bilateral con Rusia aumentó cuatro veces en los últimos cuatro años; que pasó de 310 millones de dólares estadounidenses intercambiados en 2003 a u$s 1.207 millones en 2007; es decir con un crecimiento del 430 por ciento; y de esa cifra u$s 780 millones correspondieron a exportaciones argentinas, según datos de la Cancillería argentina.
Rusia exhibe indicadores económicos positivos de manera sostenida, con un ritmo de crecimiento anual promedio del 6,2% desde 1999; con un 8,1% de crecimiento en 2007. El crecimiento de su Producto Interno Bruto (PBI) lo ubicó el año pasado en el décimo lugar entre las economías del mundo. Cuenta además con un alto nivel de reservas, que llegan a u$s 262.900 millones, ubicándose en el tercer lugar en el mundo, detrás de China y Japón.
mercosurabc
