Integración Productiva: la cooperación empresarial como bien público regional

La integración productiva, en el camino de la “agenda utópica” del Mercosur, hoy es percibida como la vía para la superación de las asimetrías y el incentivo del desarrollo regional. Lo sostuvo en una ágil ponencia el flamante coordinador del Grupo de Integración Productiva argentino, Marcelo Marzocchini. En su intervención en el panel “Integración Productiva en el Mercosur y Latinoamérica”, en el marco del 2º CIECEX de Rafaela, explicó las ventajas para una pyme al participar en los procesos de esta asociatividad regional. Y alertó sobre la necesidad de generar políticas y mecanismos de coordinación, en tanto factor clave para generar “confianza” y “cooperación” empresaria, verdadero bien público regional.


Un tópico importante hasta hoy, por lo que significó en cuanto a discusión alrededor de sus acepciones, fue la definición de Integración Productiva. Marcelo Marzocchini la ubicó claramente la definición en su ponencia, como “todo proceso que involucre algún grado de asociatividad entre dos o más unidades productivas de dos o más países”.

El que se desempeñara también como director de Mercosur e Integración de la Secretaría de Industria y Comercio de la Nación, se refirió a los primeros acuerdos de la década del ´90, que se concentraban apenas en la reducción de aranceles entre los países miembros, para pasar en el año 2000 a una etapa de “integración profunda”.

Aclaró sin embargo, que en el caso de América Latina y del MERCOSUR en particular, la integración productiva ha sido un fenómeno muy limitado, a pesar de la existencia de estructuras industriales diversificadas y la importante presencia de empresas transnacionales en la región.

Si bien aconsejó la inserción de las PyMES en redes horizontales o verticales para aprovechar las oportunidades que ofrece la integración regional, alerta sobre lo difícil que será alcanzar ese objetivo sin la existencia de mecanismos eficaces de coordinación. También pueden ser obstáculo la falta de “confianza” empresaria, por temas de idiosincrasia; el deficiente acceso a la información, y otros de los problemas que enfrentan las empresas de menor tamaño.

La Decisión del Consejo del Mercado Común N° 12/08, creó un “Programa de Integración Productiva”, marcando un nuevo paradigma de desarrollo, explicó. En términos generales, se trata de modificar la estructura sobre la cual fue construido el MERCOSUR, con el enfoque comercial de los ‘90s, en el que el mercado como agente de coordinación expuso sus problemas. En ese momento existió un incremento importante del comercio, pero las empresas de mayor tamaño se apropiaron de la renta. Las transnacionales en su capacidad de apropiación de las rentas de la cadena de valor, pueden neutralizar la distribución de beneficios esperados, agregó.

En suma, las fallas del mercado para generar incentivos positivos para la cooperación, demuestran que es necesario contar con mecanismos públicos de coordinación, lo que implica el desafío de generar un “ambiente apropiado para la cooperación empresarial”, como un “bien público regional”, y avanzar hacia políticas productivas coordinadas.

El Programa de Integración Productiva del Mercosur está dirigido a sensibilizar al conjunto de actores regionales sobre los beneficios de la integración productiva y promover la asociatividad de las pymes; su participación en las cadenas regionales de valor. Produciendo el incremento de la competitividad de los sectores productivos de los Estados Parte, pero en especial los de menor desarrollo relativo.

En cuanto a los instrumentos de financiamiento de la IP, se aprobó el Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur (FOCEM).

El FOCEM es un fondo destinado a financiar proyectos en beneficio de las economías menores del MERCOSUR. Operativo desde 2006, constituye el primer instrumento financiero del bloque con el objetivo de contribuir a la reducción de las asimetrías. Está integrado por contribuciones financieras de los Estados Partes - no reembolsables - con un monto total de USD 100 millones, acumulables. Desde 2007 y hasta fines de 2012, el Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur (Focem) aprobó 40 proyectos en diversas áreas, totalizando US$ 1,2 mil millones. O mayor proyecto presentado al fondo fue la creación de la línea de transmisión eléctrica Brasil-Paraguay, calculada en US$ 555 millones. (N del E)

En el ámbito del Grupo de Integración Productiva del MERCOSUR se aprobaron en 2010 dos Proyectos FOCEM sectoriales:

"Calificación de Proveedores de la Cadena Productiva de Petróleo y Gas", dirigido a fortalecer la cadena de aprovisionamiento de la industria regional de estos dos insumos energéticos, a partir de la integración de Pymes proveedoras de empresas “ancla”, como Petrobras. Hay 100 beneficiarios y se están conformando los Comités Consultivos nacionales. Es decir, aún no arrancó.

Por otro lado, "Intensificación y Complementación Automotriz en el ámbito del MERCOSUR", dirigido a mejorar la competitividad de pymes proveedoras de autopartes. En esta primera etapa de capacitación, que involucra una inversión de 4M de dólares, participan 100 autopartistas: 30 empresas argentinas, 45 brasileñas, 10 paraguayas y 15 uruguayas. Organismo ejecutors: ABDI de Brasil.

La Ronda de Integración Productiva Metalmecánica, que promueve la asociatividad entre empresas del bloque de este sector, fue otra de las mencionadas por Marzocchini. También está en estudio la instalación de parques eólicos piloto, para promover el desarrollo de proveedores regionales. En materia aeroindustrial, la idea es la de generar proveedores competitivos para Embraer y producir en forma conjunta aeronaves certificadas en el Mercosur. La industria naval es alcanzada por los proyectos de IP futuros.

En el ámbito del Consejo del Mercado Común, CMC, se aprobó en 2008 la creación y el estatuto del Fondo de Garantía para Micro, Pequeñas y Medianas Empresas del Mercosur, destinado a garantizar el crédito de las empresas que participen en actividades de integración productiva del bloque. Su Reglamento fue aprobado a fines de 2012 y actualmente se encuentra en proceso de elaboración el Manual Operativo, muy complicado por los diferentes sistemas de garantía vigentes en los países del bloque. Pero se presume que permitirá poner en funcionamiento el Fondo de Garantías hacia fin de año, anunció Marzocchini. (Texto Decisión Reglamento en http://www.mercosurabc.com.ar/nota.asp?IdNota=3623&IdSeccion=7)

Entre los proyectos de integración fronteriza, mencionó al primer GIP promovido entre tres países del Mercosur: Argentina, Brasil y Paraguay. El GIP Las Misiones se transformó así en el primer testimonio de asociatividad empresaria del bloque. La Integración Productiva, como parte de la necesaria “agenda utópica” del Mercosur, concluyó Marzocchini.

Graciela Baquero