La irrupción de China e India. Los principales negocios para la Argentina
Si bien el proyecto actual del gobierno chino exige la compra de recursos energéticos y alimentos, su política de largo plazo propende a la autosuficiencia alimentaria. Cuestión que debe considerada cuando se plantea una política de exportación de alimentos hacia ese país. Tanto la oportunidad de mercado constituida por China como por India, son abordados en este trabajo del profesor Roberto Bloch. Temas a los cuales el especialista se referirá en “La apertura de oportunidades comerciales en el nuevo Mercosur”, conferencia auspiciada por mercosurabc en el ciclo de EXPOCOMEX 2007. Solicite su acreditación aquí.
El pragmatismo que ha caracterizado por milenios a China le ha permitido evolucionar adaptándose a los cambios producidos en la política internacional y, al mismo tiempo, mantener sus principios y valores culturales que le han otorgado una marcada identidad.
En los últimos años del siglo veinte y principios del siglo veintiuno, China se ha convertido en una potencia exportadora e importadora y también en uno de los principales países tanto originarios como receptores de inversiones. A partir del ingreso de China a la Organización Mundial del Comercio (OMC), se abre su mercado interno a las inversiones extranjeras y también sale a la búsqueda de nuevos mercados donde invertir, entre ellos Latinoamérica y más recientemente, la Argentina. El reconocimiento por parte de Argentina para China como una '''economía de mercado" obligará a nuestro país a diseñar una estrategia a largo plazo, ya que China será un socio y también un competidor en nuestro propio mercado y en nuestros mercados de destino de exportaciones (Brasil también la ha reconocido como tal).
Básicamente, el gobierno chino pretende que su población se desarrolle y si bien esto ha comenzado a producirse en las grandes ciudades costeras, este país requiere que también suceda en su inte¬rior, sobre todo en la región centro - oeste.
Hay que tener en cuenta que China necesita abastecerse de recursos naturales, principalmente energéticos, y también necesita alimentos para su gran población. No obstante, su política a largo plazo tiene como objetivo la autosuficiencia alimentaria y esto debe ser considerado cuando se plantea una política de exportación de alimentos hacia ese país. En ese sentido, es notable en los últimos años el aumento del consumo de carne por parte de su población urbana.
Por su parte, China tiene un marcado interés en colocar inversiones en el área de infraestructura (transporte, vivienda, comunicaciones) en Latinoamérica y en la Argentina en especial. Asimismo, es un país receptor de inversiones con ese fin en su propio territorio, fundamentalmente provenientes de los Estados Unidos, Alemania, Francia y el Reino Unido.
Además de la normativa de la OMC aplicable a las inversiones extranjeras, China posee una legislación nacional para el tema; un instrumento fundamental de ella es el Catálogo para la Dirección de Industrias objeto de Inversiones Extranjeras. Este Catálogo establece tres categorías de industrias: fomentadas, restringidas y prohibidas. Las industrias no incluidas en el Catálogo pertenecen a la categoría de permitidas.
Pese a su ingreso a la OMC, China protege determinados sectores en los que la mayoría del capital debe ser nacional.
Tiene además una legislación de tratamiento preferencial impositivo para determinadas inversiones extranjeras, por ejemplo, aquellas que se dirijan a ciertas áreas del país, como las regiones occidentales o centrales.
Con respecto a los intercambios entre China y Argentina, el país del Cono Sur le vende principalmente aceites, pellets, oleaginosas, cuero, petróleo y destilados y le compra principalmente máquinas herramientas, maquinaria pesada, textiles, productos electrónicos.
Venderle a China supone la preparación de un programa a largo plazo y el desarrollo de etapas negociadoras lentas que incluyen casi siempre los contactos personales antes de concretar una operación.
Asimismo, el turismo en el extranjero interesa a China y así han comenzado a seleccionar países como destinos turísticos preferenciales, entre ellos la Argentina. Es un sector en el que también desean invertir.
Por otra parte, se ha iniciado un "diálogo" diplomático entre el Mercosur y China que tal vez derive en un futuro acuerdo de cooperación o de libre comercio. La iniciativa para estas negociaciones partió del gobierno chino y si bien es alentador para los negocios el interés demostrado, la forma del acuerdo deberá ser cuidadosamente evaluada por los gobiernos de los países del Mercosur, ya que todo indica que en los próximos años China será una de las tres primeras potencias económicas del mundo.
Negocios con la India
Algunas cifras pueden ofrecer una primera imagen del tamaño de la India como país y sus notables contrastes. La superficie de la India es de 3.290.358 kilómetros cuadrados. Su población es de 1.130 millones de habitantes. Su capital es Nueva Delhi. Otras ciudades importantes son Calcuta y Bombay. Los principales puertos son Mumbai, Nehru, Cochin y Kolkata. Si bien la Constitución de la India reconoce 15 idiomas nacionales, hablados en más de 1.600 dialectos, el hindi y el inglés son los idiomas oficiales. Con referencia al aspecto religioso, más del 80% de los habitantes son hindúes; aproximadamente un 12% son musulmanes.
Desde el punto de vista político, la India es una república democrática soberana y secular, con un sistema de gobierno parlamentario; el país se divide en 25 estados y 7 uniones territoriales, incluyendo la capital. El Producto Bruto Interno (PBI) de la India asciende a U$S 515.000 millones.
El crecimiento anual de la India es del 6,5%. La deuda externa es de U$S 100.000 millones. Alrededor de un tercio de la población vive debajo de la línea de pobreza.
La India tiene la tercera comunidad de científicos más importante del mundo.
Aproximadamente el 73 % de la población se concentra en áreas rurales; el restante 27% habita en ciudades densamente pobladas como Bombay (principal centro financiero y comercial), Calcuta y Nueva Delhi. En estas grandes ciudades ha comenzado a desarrollarse un mercado consumidor de clase media demandante de productos extranjeros.
La actividad agrícola es la más importante del país.
Pese a un importante proceso de apertura en marcha, la India aún posee barreras arancelarias altas para determinados productos y también muchas barreras extra-arancelarias, en especial fitosanitarias para alimentos.
En la actualidad, Asia y Oceanía son las regiones con las que más comercia la India, seguidas de Europa occidental. Sin embargo, el principal socio comercial como país es Estados Unidos, que absorbe casi el 20% de las exportaciones y es origen de aproximadamente el 9% de las importaciones. El comercio con América del Sur es marginal.
La India integra el SAARC (South Asían Association of Re¬gional Cooperation), que es un tratado de comercio preferencia! firmado en 1985 con Bangladesh, Bhután, Maldivas, Nepal, Sri Lanka y Pakistán (sin embargo, los conflictos políticos con este último país han ocasionado que el acuerdo sea poco operativo).
Las principales exportaciones de la Argentina a la India consisten en aceites, productos siderúrgicos, trigo, minerales metalíferos, máquinas mecánicas, ciertos cueros, lácteos.
Los productos con posibilidades de exportación son las manufacturas de hierro y acero, bombas para líquidos, colorantes, plásticos, artículos de óptica y fotografía, azúcares, algodón, equipos para convertir motores a GNC y para la industria láctea, procesadoras de carne.
* Fragmento del libro "Panorama del comercio exterior", de Roberto Bloch, Edibook, 2006
En los últimos años del siglo veinte y principios del siglo veintiuno, China se ha convertido en una potencia exportadora e importadora y también en uno de los principales países tanto originarios como receptores de inversiones. A partir del ingreso de China a la Organización Mundial del Comercio (OMC), se abre su mercado interno a las inversiones extranjeras y también sale a la búsqueda de nuevos mercados donde invertir, entre ellos Latinoamérica y más recientemente, la Argentina. El reconocimiento por parte de Argentina para China como una '''economía de mercado" obligará a nuestro país a diseñar una estrategia a largo plazo, ya que China será un socio y también un competidor en nuestro propio mercado y en nuestros mercados de destino de exportaciones (Brasil también la ha reconocido como tal).
Básicamente, el gobierno chino pretende que su población se desarrolle y si bien esto ha comenzado a producirse en las grandes ciudades costeras, este país requiere que también suceda en su inte¬rior, sobre todo en la región centro - oeste.
Hay que tener en cuenta que China necesita abastecerse de recursos naturales, principalmente energéticos, y también necesita alimentos para su gran población. No obstante, su política a largo plazo tiene como objetivo la autosuficiencia alimentaria y esto debe ser considerado cuando se plantea una política de exportación de alimentos hacia ese país. En ese sentido, es notable en los últimos años el aumento del consumo de carne por parte de su población urbana.
Por su parte, China tiene un marcado interés en colocar inversiones en el área de infraestructura (transporte, vivienda, comunicaciones) en Latinoamérica y en la Argentina en especial. Asimismo, es un país receptor de inversiones con ese fin en su propio territorio, fundamentalmente provenientes de los Estados Unidos, Alemania, Francia y el Reino Unido.
Además de la normativa de la OMC aplicable a las inversiones extranjeras, China posee una legislación nacional para el tema; un instrumento fundamental de ella es el Catálogo para la Dirección de Industrias objeto de Inversiones Extranjeras. Este Catálogo establece tres categorías de industrias: fomentadas, restringidas y prohibidas. Las industrias no incluidas en el Catálogo pertenecen a la categoría de permitidas.
Pese a su ingreso a la OMC, China protege determinados sectores en los que la mayoría del capital debe ser nacional.
Tiene además una legislación de tratamiento preferencial impositivo para determinadas inversiones extranjeras, por ejemplo, aquellas que se dirijan a ciertas áreas del país, como las regiones occidentales o centrales.
Con respecto a los intercambios entre China y Argentina, el país del Cono Sur le vende principalmente aceites, pellets, oleaginosas, cuero, petróleo y destilados y le compra principalmente máquinas herramientas, maquinaria pesada, textiles, productos electrónicos.
Venderle a China supone la preparación de un programa a largo plazo y el desarrollo de etapas negociadoras lentas que incluyen casi siempre los contactos personales antes de concretar una operación.
Asimismo, el turismo en el extranjero interesa a China y así han comenzado a seleccionar países como destinos turísticos preferenciales, entre ellos la Argentina. Es un sector en el que también desean invertir.
Por otra parte, se ha iniciado un "diálogo" diplomático entre el Mercosur y China que tal vez derive en un futuro acuerdo de cooperación o de libre comercio. La iniciativa para estas negociaciones partió del gobierno chino y si bien es alentador para los negocios el interés demostrado, la forma del acuerdo deberá ser cuidadosamente evaluada por los gobiernos de los países del Mercosur, ya que todo indica que en los próximos años China será una de las tres primeras potencias económicas del mundo.
Negocios con la India
Algunas cifras pueden ofrecer una primera imagen del tamaño de la India como país y sus notables contrastes. La superficie de la India es de 3.290.358 kilómetros cuadrados. Su población es de 1.130 millones de habitantes. Su capital es Nueva Delhi. Otras ciudades importantes son Calcuta y Bombay. Los principales puertos son Mumbai, Nehru, Cochin y Kolkata. Si bien la Constitución de la India reconoce 15 idiomas nacionales, hablados en más de 1.600 dialectos, el hindi y el inglés son los idiomas oficiales. Con referencia al aspecto religioso, más del 80% de los habitantes son hindúes; aproximadamente un 12% son musulmanes.
Desde el punto de vista político, la India es una república democrática soberana y secular, con un sistema de gobierno parlamentario; el país se divide en 25 estados y 7 uniones territoriales, incluyendo la capital. El Producto Bruto Interno (PBI) de la India asciende a U$S 515.000 millones.
El crecimiento anual de la India es del 6,5%. La deuda externa es de U$S 100.000 millones. Alrededor de un tercio de la población vive debajo de la línea de pobreza.
La India tiene la tercera comunidad de científicos más importante del mundo.
Aproximadamente el 73 % de la población se concentra en áreas rurales; el restante 27% habita en ciudades densamente pobladas como Bombay (principal centro financiero y comercial), Calcuta y Nueva Delhi. En estas grandes ciudades ha comenzado a desarrollarse un mercado consumidor de clase media demandante de productos extranjeros.
La actividad agrícola es la más importante del país.
Pese a un importante proceso de apertura en marcha, la India aún posee barreras arancelarias altas para determinados productos y también muchas barreras extra-arancelarias, en especial fitosanitarias para alimentos.
En la actualidad, Asia y Oceanía son las regiones con las que más comercia la India, seguidas de Europa occidental. Sin embargo, el principal socio comercial como país es Estados Unidos, que absorbe casi el 20% de las exportaciones y es origen de aproximadamente el 9% de las importaciones. El comercio con América del Sur es marginal.
La India integra el SAARC (South Asían Association of Re¬gional Cooperation), que es un tratado de comercio preferencia! firmado en 1985 con Bangladesh, Bhután, Maldivas, Nepal, Sri Lanka y Pakistán (sin embargo, los conflictos políticos con este último país han ocasionado que el acuerdo sea poco operativo).
Las principales exportaciones de la Argentina a la India consisten en aceites, productos siderúrgicos, trigo, minerales metalíferos, máquinas mecánicas, ciertos cueros, lácteos.
Los productos con posibilidades de exportación son las manufacturas de hierro y acero, bombas para líquidos, colorantes, plásticos, artículos de óptica y fotografía, azúcares, algodón, equipos para convertir motores a GNC y para la industria láctea, procesadoras de carne.
* Fragmento del libro "Panorama del comercio exterior", de Roberto Bloch, Edibook, 2006
Roberto Bloch