Las pymes necesitan el partenariado Mercosur- UE, antes que meras ventajas comerciales
A seis meses de cumplir sus cien años, CIRA se asocia al sistema de los Eurocentros. Es el duodécimo centro en Argentina. En el acto de inauguración, el embajador Gustavo Martín Prada, jefe de la Delegación de la Comisión Europea en Buenos Aires, explicó la función de estos centros, como entidades de cooperación económica, industrial y de desarrollo de pymes. Se refirió también a las negociaciones birregionales Mercosur-Unión Europea, que después de dos años saldrán de su letargo para retomar la agenda de la asociación estratégica. Subrayó la importancia de este partenariado, y afirmó que mucho más que ventajas comerciales, las pymes del bloque del Cono Sur necesitan un acuerdo de perspectiva de futuro estable para pensar en operaciones comerciales en una perspectiva birregional, cuando las dos regiones constituyan el mayor mercado integrado del mundo.
Si bien aún no tenemos buenas noticias, después de 2 años de cierto letargo, se podrá retomar la estratégica asociación UE-Mercosur. Estuvimos muy cerca de concluir esa negociación, en donde fuimos separados por diferencias que no sólo alcanzaban el tema agrícola, pero lo importante es que después de dos años, no sólo no abandonamos el partenariado estratégico, sino que Bruselas ha alentado a los funcionarios responsables a proseguir la negociación, señaló Martín Prada.
En muchos casos, los eurocentros dispersos en el país se han transformado prácticamente en consulados de la UE, y son usados en varias provincias como ventanillas europeas. De los 69 eurocentros en América latina, 12 están en Argentina.
Al referirse al programa Al Invest, el embajador señaló que aunque se trata de un instrumento de cooperación, muchas de las empresas que identifican socios en Europa para su capacitación, en una primera etapa, en la segunda necesitan condiciones de negocios favorables para el comercio.
Mucho más que ventajas comerciales, las pymes son las que más necesitan un acuerdo de perspectiva de futuro estable para pensar en operaciones comerciales en una perspectiva birregional, cuando las dos regiones constituyan el mayor mercado integrado del mundo, afirmó.
En referencia a otros niveles de cooperación con Argentina, el embajador hizo mención al proyecto recientemente inaugurado con el INTI, en relación con un laboratorio del sector de la miel. Otras actividades vinculadas con la educación, traerá a Buenos Aires más de siete universidades europeas para ofrecer cooperación y discutir temas institucionales. (ver nota aparte)
Para Gustavo Martín Prada, es difícil pensar en un solo aspecto importante de la agenda internacional sin una posición común o compatible entre la Unión Europea y la Argentina. En esta época de desafíos, que van mucho más allá de lo que puede resolver un país o incluso una región, se necesitan socios que compartan una visión del mundo, explicó.
En la misma ceremonia inaugural, el presidente de la Cámara de Importadores de la República Argentina (CIRA), Diego Pérez Santistéban, explicó que el programa Al Invest fue creado en 1993 por la UE para profundizar la cooperación entre empresas de Europa y América latina, especialmente las pymes. Comentó los éxitos del programa, del que ya se cumplió una segunda y se está transitando la tercera. En 13 años de desarrollo se hicieron casi 1.000 actividades, a las cuales la UE les proporcionó 90 millones de euros de recursos propios para su desarrollo, con negocios directos por 500 millones, cifra destacada teniendo en cuenta el tipo de empresas que se vinculaban, que no eran precisamente las de mayor tamaño. El sistema es muy simple, une entidades sin fines de lucro de Latinoamérica –Eurocentros- y entidades de Europa –Copecos. Al Invest apoya a fondo perdido, tanto encuentros sectoriales como actividades tales como semanas latinoamericanas en Europa o viceversa, así como capacitación en las empresas. Casi 73.000 Cámaras recibieron beneficios en estos 13 años, resaltó Santistéban, que explicó que erróneamente, la cámara que preside estimaba que los eurocentros dirigían su ayuda exclusivamente a importadores latinoamericanos, y como CIRA se dedica a colaborar con importadores argentinos, creyó no tener lugar. “Pero la misma Delegación de la UE nos sacó de nuestro error y puso un gran empeño en nuestra incorporación. Nos sumamos tardiamente en la fase III del programa, con la idea de facilitar las compras latinoamericanas a Europa”, señaló el presidente de CIRA.
Más del 80% del parque tecnológico instalado es importado y es europeo. La incorporación de CIRA constituye el ingreso de la primera cámara dedicada a los compradores de empresas europeas del sistema. Santistéban anunció además que se está discutiendo la instalación de una cuarta fase en el programa, prórroga del cual CIRA sería felizmente responsable.
El acto contó con la presencia del Secretario de Agricultura, Miguel Campos; el Subsecretario de Industria, José Luis Díaz; diplomáticos de embajadas europeas; cámaras: la Asociación de agentes de carga internacional, el Centro de navegación, y otras entidades, y contó con el auspicio del Banco de Galicia.
En muchos casos, los eurocentros dispersos en el país se han transformado prácticamente en consulados de la UE, y son usados en varias provincias como ventanillas europeas. De los 69 eurocentros en América latina, 12 están en Argentina.
Al referirse al programa Al Invest, el embajador señaló que aunque se trata de un instrumento de cooperación, muchas de las empresas que identifican socios en Europa para su capacitación, en una primera etapa, en la segunda necesitan condiciones de negocios favorables para el comercio.
Mucho más que ventajas comerciales, las pymes son las que más necesitan un acuerdo de perspectiva de futuro estable para pensar en operaciones comerciales en una perspectiva birregional, cuando las dos regiones constituyan el mayor mercado integrado del mundo, afirmó.
En referencia a otros niveles de cooperación con Argentina, el embajador hizo mención al proyecto recientemente inaugurado con el INTI, en relación con un laboratorio del sector de la miel. Otras actividades vinculadas con la educación, traerá a Buenos Aires más de siete universidades europeas para ofrecer cooperación y discutir temas institucionales. (ver nota aparte)
Para Gustavo Martín Prada, es difícil pensar en un solo aspecto importante de la agenda internacional sin una posición común o compatible entre la Unión Europea y la Argentina. En esta época de desafíos, que van mucho más allá de lo que puede resolver un país o incluso una región, se necesitan socios que compartan una visión del mundo, explicó.
En la misma ceremonia inaugural, el presidente de la Cámara de Importadores de la República Argentina (CIRA), Diego Pérez Santistéban, explicó que el programa Al Invest fue creado en 1993 por la UE para profundizar la cooperación entre empresas de Europa y América latina, especialmente las pymes. Comentó los éxitos del programa, del que ya se cumplió una segunda y se está transitando la tercera. En 13 años de desarrollo se hicieron casi 1.000 actividades, a las cuales la UE les proporcionó 90 millones de euros de recursos propios para su desarrollo, con negocios directos por 500 millones, cifra destacada teniendo en cuenta el tipo de empresas que se vinculaban, que no eran precisamente las de mayor tamaño. El sistema es muy simple, une entidades sin fines de lucro de Latinoamérica –Eurocentros- y entidades de Europa –Copecos. Al Invest apoya a fondo perdido, tanto encuentros sectoriales como actividades tales como semanas latinoamericanas en Europa o viceversa, así como capacitación en las empresas. Casi 73.000 Cámaras recibieron beneficios en estos 13 años, resaltó Santistéban, que explicó que erróneamente, la cámara que preside estimaba que los eurocentros dirigían su ayuda exclusivamente a importadores latinoamericanos, y como CIRA se dedica a colaborar con importadores argentinos, creyó no tener lugar. “Pero la misma Delegación de la UE nos sacó de nuestro error y puso un gran empeño en nuestra incorporación. Nos sumamos tardiamente en la fase III del programa, con la idea de facilitar las compras latinoamericanas a Europa”, señaló el presidente de CIRA.
Más del 80% del parque tecnológico instalado es importado y es europeo. La incorporación de CIRA constituye el ingreso de la primera cámara dedicada a los compradores de empresas europeas del sistema. Santistéban anunció además que se está discutiendo la instalación de una cuarta fase en el programa, prórroga del cual CIRA sería felizmente responsable.
El acto contó con la presencia del Secretario de Agricultura, Miguel Campos; el Subsecretario de Industria, José Luis Díaz; diplomáticos de embajadas europeas; cámaras: la Asociación de agentes de carga internacional, el Centro de navegación, y otras entidades, y contó con el auspicio del Banco de Galicia.
mercosurabc