OCDE: Candidatura de ingreso de Brasil al grupo de países desarrollados en peligro

Brasilia, 25/04/2020.- "Brasil tendrá que explicar qué es lo que hizo que el Ministro de Justicia renunciara acusando al Presidente de interferir en el trabajo de la policía", sostuvo Drago Kos, jefe del grupo de trabajo anticorrupción de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), reseña Mariana Sanches en una nota publicada en Epoca.

En una entrevista telefónica con BBC News Brasil, Kos describió el despido de Sergio Moro, un ex juez de la Operación Lava Jato, como "extremadamente preocupante". Moro renunció el viernes 24 de abril, en el que acusó al presidente Jair Bolsonaro de intentar interferir políticamente en el trabajo de la Policía Federal.

Sergio Moro reveló en conferencia de prensa, que Bolsonaro le ofreció “carta blanca” cuando lo invitó a formar parte del gobierno, después de ser elegido en 2018, pero no cumplió con el acuerdo. “Nos comprometeríamos a combatir la corrupción, el crimen organizado y el crimen violento. Me prometieron carta blanca para nominar a todos los asesores, incluidos los cuerpos policiales, la Policía Federal de Carreteras y la Policía Federal ", afirmó.
Si bien "el presidente tiene esta competencia [para nombrar al director general de la FP], se comprometió a que sería una elección técnica y yo tomaría esa decisión", señaló el ministro saliente, de acuerdo con Epoca.

La intervención de Bolsonaro -asegura Moro- expuso su interés por ubicar en la corporación a un hombre de confianza, para contar con información sobre las investigaciones en curso, que implican a toda su familia.

"Sergio Moro es un símbolo en la lucha contra la corrupción, es un luchador, conocido por trabajar en situaciones adversas. Esto significa que debe haber una razón muy fuerte”para abandonar sus funciones”, dijo Kos, a cargo del área anticorrupción de la agencia desde 2014, el mismo año en que comenzó la Operación Lava Jato en Brasil (esta Operación derivó en la prisión sin pruebas del ex presidente Lula da Silva, N del E).

A pesar de que en enero Brasil recibió el respaldo de Estados Unidos para ingresar en la OCDE, estos sucesos complican la candidatura.

Para ser aceptado en el grupo de países desarrollados, el país necesita comunicar su progreso en temas como la salud, la educación y la lucha contra la corrupción. Por esta razón, Brasil ha enviado informes periódicos sobre el progreso y los contratiempos en esta área.

"Los ministros van y vienen, esto no es un problema para nosotros. Pero cuando el ministro de Justicia lo acusa de serias interferencias en su trabajo para combatir la corrupción, esto es serio y eso nos interesa. Brasil tendrá que explicar qué es sucediendo ", apunta Kos, cuya próxima reunión con representantes brasileños tendrá lugar en junio, de forma remota, debido a la epidemia de Covid-19.

Según la Constitución brasileña, el presidente solo puede ser investigado con autorización del Tribunal Supremo Federal. En este sentido, el mismo 23 de abril el TSF interpeló al Congreso para aceptar el inicio de un proceso de juicio político, aunque el trámite se retrasó esencialmente por la falta de una respuesta unificada de la oposición.

Para Kos, la partida de Moro puede empeorar la situación de inestabilidad política en Brasil, no solo en la lucha contra la corrupción. Llamó a las medidas del gobierno federal para combatir la epidemia de coronavirus "vacilantes". El país ya tiene más de 50,000 casos de la enfermedad, con más de 4000 muertes y, la semana pasada, Bolsonaro destituyó al ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta.

"Creo que esto tendrá muy malas consecuencias para Brasil en general, y espero que no debilite aún más al país en medio de esta pandemia. Espero que la situación no empeore aún más. Estoy muy preocupado", concluyó el funcionario de OCDE. BBC News.