Panorama alentador para el intercambio Argentina/ Brasil
A diferencia de las crisis de los 90, América Latina verifica una salida mucho más rápida, tanto por la fuerte acumulación de reservas, como por el desempeño contracíclico de algunos países, destacó Dante Sica, en su ponencia en el seminario organizado por la fundación Pro Buenos Aires sobre “La crisis Internacional y su impacto sobre las negociaciones internacionales”. En relación con el Mercosur, el director de la consultora abeceb.com, alertó sobre un presente estacionario, sin grandes acciones como bloque. Pero en cuanto a la Argentina pronosticó un futuro favorable basado en la recuperación de los commodities y en un Brasil en crecimiento que garantiza la continuidad de la demanda del su principal cliente de productos manufacturados. Describió ciertos retrasos en el mercado común que deben atenderse cuanto antes. El bloque “esconde una suma de acciones siempre bilaterales entre Brasil y el resto de los miembros que hay que tratar de revertir”, señaló.
Organizado por la fundación Pro Buenos Aires se realizó el seminario “La crisis Internacional y su impacto sobre las negociaciones internacionales”. La mesa en la que el Licenciado Luis Fortino y Hugo Guerrieri oficiaron de presentadores, tuvo como principal expositor al Licenciado Dante Sica, economista, docente universitario y director del portal especializado en temas económicos abeceb.com.
La presentación de DC comenzó con un análisis estadístico en el que comparó, la actual crisis internacional respecto a otros trances históricos por los que ha pasado la economía mundial. No faltó en ese marco, la observación de cuales pueden ser las proyecciones del incipiente proceso de salida que empieza a mostrar la economía mundial, y los desafíos que deberán asumir los países emergentes en general y el MERCOSUR y Argentina en particular, para surgir de la crisis en condiciones de fortalecimiento.
El Lic. Sica también analizó durante su exposición las reacciones de los distintos países en respuesta a la crisis “no es inocuo el modo en que cada país reaccionó frente a la crisis de cara a un 2010 en la que se avizora un crecimiento de la economía mundial “. Trazó una retrospectiva y cuadros estadísticos mediante, demostró que aun antes de la crisis, la economía del planeta venía cambiando paulatinamente, “ya antes de la crisis la geografía del poder económico mundial se estaba trasladando desde occidente a oriente con un papel fundamental de China, en dicho proceso”. Esta tendencia se profundizará según Sica en la actual etapa, debido a que los países emergentes serán protagonistas fundamentales del crecimiento posterior a “una de las más grandes caídas de la economía mundial desde la gran depresión”.
Pormenorizó también en el modo en que se vieron afectados determinadas países y áreas específicas de la economía, destacando como los rubros más afectados a los comodities combustibles y energéticos. Venezuela y Chile aparecen en ese sentido, como los más golpeados de la región debido a la baja sufrida por el petróleo y el cobre.
Una de las características específicas de esta crisis fue la velocidad de transmisión de su impacto a toda la economía global, que en principio tomó de sorpresa a la mayoría de las naciones. Como respuesta general, los gobiernos y sus ministerios de economía, respondieron tomando medidas proactivas de incentivo al consumo interno, protección de sus industrias y puestos de trabajo. “La gran diferencia entre las distintas respuestas fueron la disponibilidad de recursos, con los que contaba cada Estado”, prosiguió Sica. Incrementos de aranceles, rescate de industrias, especialmente las automotrices, devaluaciones competitivas, compre nacional, fueron algunas de las acciones en común que tomaron la mayoría de las naciones como parte de sus paquetes de ayuda a sus economías internas.
Describió el mundo previo a la crisis en la que se veía un consumo de los países del primer mundo sostenido, especialmente desde el año 2000, por los países emergentes: “La tasa de expansión del mundo del 5 % de los últimos años se explica por los procesos de crecimiento y desarrollo industrial especialmente en China y la India junto a otras economías regionales”, un dato que según explicitó Sica demuestra que el crecimiento bruto de la economía se basa cada vez menos en los países del primer mundo y más en los emergentes.
Momento actual y perspectivas
Los datos actualizados demuestran la paulatina salida de la etapa recesiva.
Al respecto enumeró algunos de los países que “picaron en punta”, como el caso de Francia y Alemania que ya obtuvieron datos positivos en el segundo trimestre de este año y a nivel regional se destaca Brasil con crecimiento positivo en el tercer trimestre y con datos relevantes tales como que fue junto China “los dos únicos países que vendieron mas autos en el 2009 que en el 2008”. Está tendencia de crecimiento con un pronóstico del 2 al 3 % para la economía mundial, ya comienza también a manifestarse en toda nuestra región.
En este segundo tramo de su alocución pormenorizó sobre la situación regional.
¿Cómo impactó la crisis en AL?
“Al igual que en otras crisis la manifestaciones fueron similares”, afirmó Sica, con “el cambio abrupto del flujo financiero con salida importante de capitales y sus consecuencias para la economía interna”. Pero, “a diferencia de las crisis de los 90, ésta nos tomó muchísimo mejor parados con fuerte acumulación de reservas”, lo que implicará que la salida de la misma será mucho mas rápida a la de otros ciclos. Actualmente ya comenzó a estacionarse la salida de capitales y paulatinamente – describió - vuelve la inversión en la medida en que se verifican los primeros síntomas de crecimiento.
En cuanto a la actuación de los distintos Gobiernos de la región, en igual sintonía que en el resto del mundo, generaron políticas proactivas y contracíclicas. Respecto a la Argentina subrayó que este país tuvo una política muy activa en el mantenimiento del empleo.
En una comparativa entre Brasil y Argentina afirmó el último tuvo más limitaciones, como producto de que no pudo utilizar sus reservas con la misma amplitud de maniobra que Brasil. En el marco interno argentino, la inyección de dinero en el mercado, que en otras naciones, implicó un aumento automático del consumo, derivó en una demanda de dólares producto de cuestiones de índole política y de la desconfianza de un amplio sector de la población, que no pudo distinguir el carácter diferencial de esta crisis respecto a otras que ha sufrido en el pasado.
Respecto al MERCOSUR alertó sobre una actualidad estacionaria sin grandes acciones como bloque. Describió ciertos retrasos en el mercado común que deben atenderse cuanto antes. “El MERCOSUR esconde una suma de acciones siempre bilaterales entre Brasil y el resto de los miembros que hay que tratar de revertir”.
En cuanto a la Argentina pronosticó un futuro favorable basado en la recuperación de los comodities y en un Brasil en crecimiento que garantiza la continuidad de la demanda de nuestro principal cliente de productos manufacturados.
Habrá que sumar un contexto con dólar que se seguirá depreciando y nos permitirá condiciones aun mas competitivas respecto a otros mercados, si es que continuamos con una moneda que mantenga su relación con la divisa americana.
Estratégicamente – destacó - es fundamental para nuestro país analizar profundamente cuales son los nichos que mas van a crecer dentro de un marco de paulatina recuperación de la economía global. Prosiguió: “Podemos por ejemplo mejorar nuestro rol en algunos bienes manufacturados, especialmente el metalmecánico, siempre mirando a algunos mercados no tradicionales”.
Culminó su presentación afirmando la importancia que va a tener en el contexto que se espera para los próximos meses, la recuperación de la inversión extranjera directa como factor que potencie junto al ahorro local, las posibilidades de crecimiento y desarrollo. Será la manera de aprovechar al máximo “los nuevos vientos de cola que aparecen en el horizonte” culminó.