Precisar el rol del Mercosur ante los cambios globales
En el marco de la Presidencia Pro Tempore del Mercosur a cargo del gobierno argentino, se realizó el martes 14 en Buenos Aires, la reunión del Grupo Mercado Común, para definir las grandes líneas de agenda del semestre.
Los tres grandes bloques de debate, se ajustaron a los temas relacionados con el área político-social; en segundo término los institucionales y por último la integración económica regional.
En lo que se refiere al primer bloque, de acuerdo con fuentes cercanas a la Cancillería argentina, se discutió el Plan Estratégico de Acción Social del Mercosur. La implementación del Plan del Sector Educativo; iniciativas en materia de derechos humanos y de justicia y seguridad.
En el ámbito institucional se vieron temas relacionados con la Secretaría del Mercosur, y la consolidación del papel del Alto Representante General del bloque regional.
En materia de integración regional se lo enmarcó en la crisis global. La integración productiva apareció como el primer punto a profundizar y consolidar. El tema de la reglamentación del código aduanero. La política automotriz y la propuesta de una reunión de los ministros de Industria, dirigida a fortalecer el Subgurpo 7 de Industira.
En cuanto a la política externa, se analizaron las relaciones Mercosur-Unión Europea, Mercosur-Ecuador, Mercosur-Canadá y Mercosur-Venezuela.
La presidencia pro tempore argentina, según las mismas fuentes, pretende contribuir a fortalecer y precisar el rol del Mercosur ante los cambios globales. Hay quienes reclaman del Mercosur un rol mucho más activo, pero la agudización de las dificultades que genera las políticas de crisis de los países desarrollados, obliga a poner a resguardo la alquimia entre el desarrollo regional y local.
Sin embargo, además de las limitaciones, se produjeron grandes avances, como el cumplimiento del plafond de países que aprobaron el proyecto del Banco del Sur, que lo hace de próxima implementación.
El tema de Malvinas, desarrollado en la introducción de la reunión, se ha manifestado en la región en cuanto a tres grandes temas: soberanía, rechazo a un enclave militar extranjero y explotación indiscrirminada de nuestros recursos. Los países del Mercosur, de Unasur, de CELAC, el Grupo 77 + China y las Cumbres Iberoamericanas rechazaron la política británica en el archipiélago del Atlántico Sur. Constituyen grandes avances en grandes temas.
Todo esto forma parte de un proceso unívoco, donde la región está adquiriendo una suerte de mirada común, que hay que hacer que se manifieste en los aspectos económicos comerciales de acuerdo a las necesidades de los países.
Esta reunión de coordinadores del GMC se desarrolló para determinar las grandes líneas de trabajo. Argentina tuvo una delegación con una presencia muy activa de la Cancillería, Secretaría de Comercio, de Industria, de Agricultura.
En lo que se refiere al primer bloque, de acuerdo con fuentes cercanas a la Cancillería argentina, se discutió el Plan Estratégico de Acción Social del Mercosur. La implementación del Plan del Sector Educativo; iniciativas en materia de derechos humanos y de justicia y seguridad.
En el ámbito institucional se vieron temas relacionados con la Secretaría del Mercosur, y la consolidación del papel del Alto Representante General del bloque regional.
En materia de integración regional se lo enmarcó en la crisis global. La integración productiva apareció como el primer punto a profundizar y consolidar. El tema de la reglamentación del código aduanero. La política automotriz y la propuesta de una reunión de los ministros de Industria, dirigida a fortalecer el Subgurpo 7 de Industira.
En cuanto a la política externa, se analizaron las relaciones Mercosur-Unión Europea, Mercosur-Ecuador, Mercosur-Canadá y Mercosur-Venezuela.
La presidencia pro tempore argentina, según las mismas fuentes, pretende contribuir a fortalecer y precisar el rol del Mercosur ante los cambios globales. Hay quienes reclaman del Mercosur un rol mucho más activo, pero la agudización de las dificultades que genera las políticas de crisis de los países desarrollados, obliga a poner a resguardo la alquimia entre el desarrollo regional y local.
Sin embargo, además de las limitaciones, se produjeron grandes avances, como el cumplimiento del plafond de países que aprobaron el proyecto del Banco del Sur, que lo hace de próxima implementación.
El tema de Malvinas, desarrollado en la introducción de la reunión, se ha manifestado en la región en cuanto a tres grandes temas: soberanía, rechazo a un enclave militar extranjero y explotación indiscrirminada de nuestros recursos. Los países del Mercosur, de Unasur, de CELAC, el Grupo 77 + China y las Cumbres Iberoamericanas rechazaron la política británica en el archipiélago del Atlántico Sur. Constituyen grandes avances en grandes temas.
Todo esto forma parte de un proceso unívoco, donde la región está adquiriendo una suerte de mirada común, que hay que hacer que se manifieste en los aspectos económicos comerciales de acuerdo a las necesidades de los países.
Esta reunión de coordinadores del GMC se desarrolló para determinar las grandes líneas de trabajo. Argentina tuvo una delegación con una presencia muy activa de la Cancillería, Secretaría de Comercio, de Industria, de Agricultura.
Graciela Baquero