Unasur tiene su primer secretario general

El ex presidente Néstor Kirchner asumió como el primer secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas. Consenso y desactivación del voto uruguayo. El nuevo cargo destrabará la mayor parte de los proyectos votados en el organismo.


Néstor Kirchner prestó juramento ante los representantes de los 12 países que integran el bloque regional reunidos en el hotel Sofitel de Los Cardales, provincia de Buenos Aires, tras haber sido electo por consenso de los jefes de Estado de la región, después de que el presidente de Uruguay, Mujica, desactivara el veto del anterior mandatario relacionado con el conflicto por Botnia. La ceremonia de la jura estuvo encabezada por Rafael Correa, presidente pro témpore del bloque.


Uruguay desactiva el veto

El gobierno de José Mujica aclaró ante la opinión pública de su país, que no se trató de un apoyo a la candidatura de Néstor Kirchner a la secretaría general de la Unasur, sino al consenso del resto de los países del bloque.

La posición del presidente fue en línea con el "ni voto ni veto" que había anunciado días atrás, en alusión al apoyo al consenso que se produjera, cualquiera que este fuera, según destacó la prensa uruguaya.

Por otro lado, Mujica admitió ante sus pares de la Unasur que deberá pagar un costo político por la decisión que tomó, mientras que Danilo Autori sostuvo que la misma "no debe ser tomada aisladamente, por que puede llamar a engaños". "Hemos decidido acompañar el consenso de los presidentes de América Latina para que se pueda dar este paso porque aspiramos a progresar en el conjunto de los pueblos del continente", afirmó Mujica.

El presidente uruguayo señaló que su país adoptó esa decisión "sin condicionamientos y por la unidad de América Latina. Vamos a seguir apostando a esa política y a la buena fe de nuestros pueblos".

En una conferencia de prensa reproducida por El País, el vicepresidente Danilo Astori manifestó que la actitud de Uruguay ante la elección de Néstor Kirchner como secretario general de la Unasur "no debe ser tomada aisladamente, por que puede llamar a engaños". "Todas las actitudes que adoptemos son pasos que Uruguay está dando con tolerancia y humildad para solucionar no este tema, sino todos los temas", sostuvo Astori. A su vez, el vicepresidente afirmó que "tenemos una agenda muy nutrida con Argentina". Entre otros temas pendientes con el país fronterizo, Astori destacó el corte de los puentes y la empresa finlandesa Botnia.

Pero también reconoció que no son los únicos temas a tratar con Argentina. También recordó que el dragado del Río Uruguay, del Canal Martín García, el pasaje del gas boliviano, "son otros de los temas que no se pueden dejar de lado".

En la cumbre participaron los presidentes Cristina Kirchner (Argentina), Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil), José Mujica (Uruguay), Rafael Correa (Ecuador), Fernando Lugo (Paraguay), Sebastián Piñera (Chile), Evo Morales (Bolivia) y Hugo Chávez (Venezuela), más los cancilleres de Colombia, Perú, Surinam y Guyana.

Por su parte, el presidente de Brasil, Lula da Silva, sostuvo que la consagración de Kirchner "consolida una etapa más del fortalecimiento de la Unasur", y destacó su "experiencia, conocimiento del continente y de las dificultades políticas" de la región.
"Kirchner tiene experiencia, entiende las diferencias, está ciento por ciento apto para ser un extraordinario secretario general de la Unasur", sostuvo el mandatario brasileño.

Evo Morales consideró que Kirchner "es como el primer presidente de Sudamérica”, al reafirmar su apoyo a la candidatura del argentino. Chávez, en tanto, destacó la figura de "estadista" del santacruceño y consideró que "difícilmente se pueda conseguir en este momento a alguien con mayor experiencia y pasión por el Sur" que él.

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, otorgó su apoyo a Kirchner y aprovechó para proponer que la Unasur “se fije metas exigentes y plazos definitivos con mecanismos que permitan ir evaluando el cumplimiento. No hay razón para que, con todas las riquezas siga siendo un continente sub desarrollado”. En esa línea, emplazó a "levantar la vista" y a fijarse "metas y plazos", reeditando el estilo que ha utilizado en Santiago para apurar el paso a sus propios ministros. Y puso como temas centrales consolidar la democracia, derrotar el subdesarrollo, superar la pobreza y fomentar la paz en la región.

Colombia, representada por el canciller Jaime Bermúdez, destacó que el consenso en la designación es una señal clara de determinación política. “Unasur ha dado señales claras de responder de forma inmediata ante casos puntuales y en momentos de dificultades donde hay rechazo explícito a acciones ilegítimas. Así debemos acompañar a cualquier país en donde haya dificultades o calamidades”, mencionó.

Por su parte, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, felicitó el nombramiento de Kirchner y lo convocó a trabajar por la integración. En este sentido, hizo un llamado al respeto en la región. “Respetémonos. Dejémonos de declaraciones ofensivas que le obligan a uno responder por la dignidad. Venezuela solo pide respeto, que nos se nos estropee ni utilice”, puntualizó.
También saludó la decisión de Uruguay y Argentina de mejorar sus relaciones. “No debemos alimentar entre notros los conflictos hay que pasar la página y hacer todo los esfuerzos para superarlos”, indicó.

Minutos después, el presidente chileno Sebastián Piñera ocupó la misma tribuna para responder el mensaje venezolano. "Hay diferencias, y éstas las hemos conversado con el Presidente Chávez, pero como dicen los franceses, ¡vivan las diferencias! Lo importante es saber no sólo respetarnos, sino que superar esas diferencias", dijo el Mandatario.

A pesar de declaraciones que se manifiestan por un perfil regional opositor a Chávez, en el marco de Unasur se bajaron los decibeles acerca de las “dos visiones” existentes en América Latina, concepto acuñado por Piñera. En este marco, Hugo Chávez invitó a hacer una visita a Caracas a su par chileno.


La agenda de trabajo

La Unasur trató varios temas de preocupación para los países de la región. Entre ellos, se acordó comenzar a liberar la ayuda ya acordada con anterioridad de 100 millones de dólares para Haití, de los cuales sólo se desembolsaron 7,5 M, según destacó el presidente de Ecuador y presidente pro tempore del organismo, Rafael Correa, en una entrevista colectiva junto a Cristina Fernández, anfitriona del encuentro. Para el primer mandatario, el liderazdo de un ex presidente, como Néstor Kirchner, hará que se pueda sortear la burocracia, que impide que los ministros de finanzas regionales liberen fondos de ayuda, cuando rápidamente lo hacen cuando se trata de pagar deudas a organismos internacionales, espetó.

Otro proyecto a activar en breve según el documento final, será el del diseño de una estrategia que permita la integración en el sector de energía regional, iniciativa que ya fuera aprobada en mayo de 2008 por Unasur y que no ponía en práctica por falta de un secretario general que tomara decisiones.

La Cumbre también aprobó la conformación de un Consejo Sudamericano de Educación, Cultura, Ciencia, Tecnología e Innovación.

La reunión repudió la ley de inmigración del estado norteamericano de Arizona. Esta Ley “permite la posibilidad de detener a las personas de manera discrecional por consideraciones raciales, étnicas, fenotipo, lenguaje y estatus migratorio, mediante el concepto cuestionable de duda razonable”, señala la declaración de los presidentes.

Al mismo tiempo se dio apoyo a Paraguay por el estado de excepción que dictó por la presencia de grupos insurgentes. Se volvieron a apoyar los derechos de Argentina sobre las Islas Malvinas y el Archipiélago del Atlántico Sur.

En relación con la situación de Honduras, los países de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) se comprometieron a no asistir a la Cumbre de América Latina y el Caribe y Unión Europea (ALC-UE) de Madrid, de participar el actual presidente hondureño, Porfirio Lobo. La cumbre se celebrará entre los próximos días 17 y 18 de mayo y Lobo ya ha confirmado su asistencia, no así otros países de la región como Brasil, Venezuela o Argentina, que no han reconocido al Gobierno hondureño, por haber vencido en unas elecciones auspiciadas por el Gobierno 'de facto' que lideró Honduras tras el golpe de Estado.
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