Dilema de paradigmas en UNASUR. Integración económica o integración política

* Jornada COPPPAL. Dilema de paradigmas en UNASUR
* La Coordinadora de Centrales Sindicales del Cono Sur propone la creación del ITM
* Consejo Agropecuario del Sur reanuda discusión sobre precios de los alimentos


JORNADA COPPPAL
DILEMA DE PARADIGMAS EN UNASUR. INTEGRACIÓN ECONÓMICA O INTEGRACIÓN POLÍTICA


“No se puede pretender lo mejor de los dos mundos: o se acepta el criterio del Consenso de Washington y se avanza en la integración vinculada al enfoque comercial o se pierden las ventajas derivadas de constituir un proceso de integración como el MERCOSUR que batalla no sólo en el plano regional sino también en el mundial”. Así graficó el embajador Sigal en una conferencia organizada por COPPAL y CENSUD el 12 de junio en Buenos Aires, el problema derivado de los dos paradigmas en debate hacia la organización de UNASUR, recientemente conformada.

La Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL) junto con el Centro de Estudios Sudamericanos (CENSUD) del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de La Plata organizó la primera actividad del ciclo de conferencias "El Rol de los Partidos Políticos en la integración regional". Allí, Torcuato Di Tella, Gustavo Cardesa, Eduardo Sigal y Zidane Zeraoui, disertaron acerca de “Los diferentes paradigmas de la integración: integración económica o integración política”.

Con la presentación de Antonio Cafiero, Presidente de la COPPPAL, y de Norberto Consani, Director del CENSUD, se inauguró el ciclo de conferencias "El Rol de los Partidos Políticos en la integración regional" que tiene por finalidad profundizar la integración política y económica del continente a través de la acción articulada de los institutos.

En la primera actividad conjunta, el diálogo político-académico quedó plasmado en las ponencias de los disertantes. En este sentido, el Embajador Eduardo Sigal, Presidente del Frente Grande, instó a romper la fractura entre los partidos políticos y el ámbito académico para pensar de modo conjunto los procesos de integración latinoamericanos y sudamericanos.

En relación a la propuesta de reflexionar acerca de la integración en términos económicos o políticos, Sigal planteó que no hay proceso que tenga uno sólo de estos componentes, ya que no es posible la integración económica por fuera de los lineamientos políticos.

Según Sigal se ha pensado que sólo los mercados podían resolver la proximidad o la distancia entre los países y los pueblos pero es una falacia neoliberal porque, ya de por sí, es una política aunque se plantee que el mercado regula los procesos de integración.

La integración sin política implicaría pensar que no hay marcos jurídicos, ni monedas –que suponen la existencia de soberanías- ni reglas de juego. En realidad hay diferentes concepciones y paradigmas sobre los procesos de integración económicos y políticos.

Para Sigal, los Estados intervienen siempre en la economía, por lo tanto, siempre intervienen políticamente; aquello que difiere, en todo caso, es el tipo de intervención según los intereses que defiende. Así, el Embajador planteó que “dejar que el mercado regule las formas de trabajo es intervenir, desnacionalizar la explotación de los recursos naturales, bajar los aranceles al mínimo, o, desproteger las industrias nacionales… es establecer políticas.”

A su vez, Sigal argumentó que está mutando la concepción que polariza los procesos de integración en tanto se ciernen a la esfera económica o a la esfera política. Este cambio se manifiesta a partir de los paradigmas que enmarcan las propuestas del MERCOSUR actual y de UNASUR.

Estos procesos de integración regional dinamizan una búsqueda que no descarta aquellos temas presentes en los ’90 – como la libre circulación de bienes o el tema de la unión aduanera- pero se piensan, para Sigal, no sólo desde una óptica comercial sino que impulsan la participación activa de la política en la construcción del bienestar general.

Con respecto a UNASUR, Sigal cree que existe al interior una visión de mayor proximidad a la de los ’90 debido a que prima una concepción de la integración como sinónimo de libre comercio. Ante ello objetó que “no se puede pretender lo mejor de los dos mundos: o se acepta el criterio del Consenso de Washington y se avanza en los Tratados de Libre Comercio, en la integración vinculada al enfoque comercial o se pierden las ventajas derivadas de constituir un proceso de integración como el MERCOSUR que batalla no sólo en el plano regional sino también en el mundial.”

En este sentido, el Embajador Eduardo Sigal, destacó que los procesos de integración deben estar políticamente comandados para priorizar la mejora de la calidad de vida de los países de la región. Por lo tanto, los proyectos regionales sólo pueden avanzar con Estados fuertes que permitan, al mismo tiempo, el fortalecimiento en términos competitivos a nivel global.

Por su parte, Gustavo Cardesa, Presidente del Partido Intransigente, expresó que hoy nos encontramos en una etapa emancipatoria de América Latina a raíz de las crisis económicas neoliberales en el mundo.

No obstante, estimó que dentro de Latinoamérica se han desarrollado procesos de integración que difieren entre sí, como es el caso de los Tratados de Libre Comercio y el MERCOSUR que posee otra construcción histórica aunque Brasil se posicione como país hegemónico al cuidado de la relación de complementariedad – competencia que mantiene con Estados Unidos.

A modo de ejemplo, Cardesa se refirió a los orígenes del modelo de integración del ALBA y a cómo a partir de 2006 Venezuela se retira debido a los Tratados de Libre Comercio que los países miembros negocian con Estados Unidos, hecho que genera un acercamiento de Venezuela al MERCOSUR.

Además, el Presidente del Partido Intransigente expresó que, en relación a la discusión en torno al rol del Estado, el MERCOSUR postula la convivencia de las empresas estatales y privadas. En tanto Venezuela apunta a la creación de empresas ‘grannacionales’.

Según Cardesa, el rol del Estado argentino es más amplio -en comparación al de los países de la región- pero está limitado, ya que no es empresario sino que genera condiciones favorables para el sector privado.

En este sentido, planteó que Venezuela lanzó tanto TELESUR como el Banco del Sur porque posee una idea emancipatoria y esta lógica es compartida por el eje Sur-Sur no sólo para conseguir una autonomía económica que nos acerque a los países desarrollados, sino para lograr el bienestar de los pueblos.

En términos de Gustavo Cardesa la relación entre Estado y mercado apunta a “dejar que el pájaro vuele pero en su jaula” o postular “tanto mercado como sea posible, tanto Estado como sea necesario”.

El sociólogo Torcuato Di Tella, se refirió en esta oportunidad al rol de la cultura en el MERCOSUR. Para ello argumentó que se debe consolidar el conocimiento mutuo, ya que años atrás en Argentina conocíamos la realidad de nuestro país, también la europea y un poco la norteamericana pero no conocíamos la realidad Latinoamericana. Lo mismo sucedía en relación al conocimiento de los partidos políticos de cada país.

Según Di Tella, esa ignorancia mutua llevaba a equivocaciones. Por ello, expresó que la teoría política es una elaboración académica basada en el conocimiento y actualmente está siendo elaborada por los países desarrollados. Si “la teoría política es una extrapolación de lo que a ellos les pasa. Entonces, no nos orienta”.

Si todos los fenómenos se encuentran interrelacionados, habría –para Di Tella- que conocer lo que sucede al interior de cada país sin aislarlo del contexto en el que se produce e interpretarlo, a la vez, según las características locales.

Por último, Zidane Zeraoui, profesor del Tecnológico de Monterrey, México, dijo que “hay que romper con la dictadura de los partidos políticos, porque son una verdadera dictadura (…) ya que un candidato independiente no se puede presentar a la presidencia.”

Con respecto a UNASUR planteó que es el claro ejemplo de que hay dos Latinoaméricas: una del Canal de Panamá hacia arriba y otra, correspondiente al Sur. Realizó además un recorrido desde la década del ’80 hasta la actualidad sobre la relación económica entre Estados Unidos y México; deteniéndose en la presidencia de Carlos Salinas, quien a partir de 1988 propició la apertura comercial.

Según Zeraoui, la apertura aceleró el desmantelamiento de las empresas estatales y las privatizaciones, siendo el proyecto más importante la firma del Tratado de Libre Comercio. Sin embargo, destacó que la negociación de dicho tratado no fue política sino meramente económica.

Firma: Alelí Jait


PROPUESTA INSTITUTO DE TRABAJO DEL MERCOSUR

La reunión de la Coordinadora de Centrales Sindicales del Cono Sur desarrollada el 1º de julio en San Miguel de Tucumán, preparó una propuesta para ser presentada en la Cumbre de Presidentes del Mercosur, por la cual insta a la aprobación de la creación del Instituto de Trabajo del Mercosur – ITM-, que deberá cumplir los objetivos de:

Establecer una política regional para la promoción y el respeto a los derechos de los y las trabajadores/as y convenios internacionales de OIT, especialmente en lo referido al Trabajo Decente, partiendo de las normas nacionales vigentes.

Constituir una estructura orgánica y material con capacidad de contener y articular los organismos sociolaborales, permanentes y transitorios, como la Comisión Sociolaboral, el Observatorio del Mercado de Trabajo, Grupo de Alto Nivel de Empleo y políticas y programas para tratar los temas de inspección del trabajo, formación profesional, erradicación del trabajo infantil y explotación sexual de menores, igualdad de género, empleo de jóvenes.

Contener la Comisión de Seguimiento del Acuerdo Multilateral de Seguridad Social (coordinado por los Ministerios responsables para la gestación de ese Acuerdo)

Acompañar la implementación del Acuerdo de Residencia del MERCOSUR.

Texto Propuesta.doc

CONSEJO AGROPECUARIO DEL SUR REANUDA DISCUSIÓN SOBRE ALZA DE LOS PRECIOS DE LOS ALIMENTOS

El Consejo Agropecuario del Sur (CAS), formado por los Ministros de Agricultura de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay, sesionará los días 28 y 29 de agosto, en la V Región de Chile. El alza de los precios de los alimentos, es el motivo que vuelve a congregar a las máximas autoridades de la agricultura de la región, en su XIV Reunión Ordinaria.

También en esta reunión del Consejo, se realizará el cambio de presidencia, la cuál será entregada por un año al Ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca de Uruguay, Ernesto Agazzi por la Ministra de Agricultura de Chile, Marigen Hornkohl.

El alza de los precios de los alimentos fue discutido en la VIII Reunión Extraordinaria del CAS (27 de mayo, Montevideo), donde el foro ministerial acordó la conformación de una estrategia común para incidir en el factor precio, la que consistió en aumentar la oferta alimentaria de la región, a través del apoyo a los pequeños productores y la agricultura familiar. También en la pasada sesión privada, los representantes reconocieron en el aumento de los precios de los alimentos, una oportunidad excepcional para la región, argumento que debería favorecer las negociaciones en la Ronda de Doha. La evolución y el seguimiento de los acuerdos alcanzados y futuros lineamientos de política sobre este tema serán expuestos en el encuentro de los días 28 y 29 de agosto.

Además en la XIV Reunión del CAS se abordarán temas como la sanidad animal y vegetal, que contarán con el aporte del Comité Veterinario Permanente (CVP) y el Comité de Sanidad Vegetal (COSAVE). El avance de los grupos de trabajo técnico de la región será el punto tratado por la Red de Coordinación de Políticas Agropecuarias (REDPA). También son convocados para el diálogo con los ministros, los organismos internacionales que cooperan con el sector agropecuario como son IICA, OIE, FAO, BID y BM así como el sector privado y académico de la región.

Fuente: IICA

mercosurabc