Se retoman las negociaciones UE-Mercosur

En una conferencia celebrada el jueves pasado en Expocomex 2010, auspiciada por el Ministerio de Desarrollo Económico de la Ciudad de Buenos Aires, el profesor Félix Peña se refirió a la próxima Cumbre ALC-UE, después del anuncio del Colegio de Comisarios de la Unión Europea, del relanzamiento de las negociaciones con Mercosur. Tres escenarios posibles para un final abierto.


¿Cuáles son los planos que inciden en la eficacia con la cual nos proyectamos en el mundo?

Hoy los consumidores están expuestos a gran cantidad de opciones, es cada vez más difícil el acceso, a pesar de que los datos de la OMC consignan que no ha habido tanto proteccionismo como podría haber existido ante la crisis desatada el año pasado, Esto es porque el sistema de exportaciones/ importaciones está en estrecha relación, y hay que cuidar de desarticularlo. Esto se refleja en hechos como la aplicación de licencias a las importaciones aplicadas por Brasil, que finalmente tuvo que ser desarticulado por el mismo gobierno, señaló el profesor Félix Peña en su ponencia relacionada con la OMC y las negociaciones de comercio internacional en el marco del panel organizado por el Ministerio de Desarrollo Económico de la Ciudad de Buenos Aires.

Cada vez hay más conciencia del grado de competitividad que debe reunir, por ejemplo la ciudad de Buenos Aires, para llegar al mundo. Por un lado disponer de una plataforma que permita usar el potencial de la producción; por el otro la calidad de la conexión física, cultural de un mercado con otros; por último la conectividad de los sistemas económicos es clave para el éxito de la performance de determinada economía. Esto tiene que ver con la calidad de los accesos a otros mercados. Podemos tener buena conectividad, pero podemos enfrentarnos a retenciones arancelarias, sanitarias, o por reglas privadas acordadas en un país.


Las negociaciones en la OMC y las bilaterales Mercosur-UE

El estudio de estos organismos lleva la adaptación continua a los cambios. El organismo está en posición sino de parálisis, por lo menos “de descanso” en los próximos doce meses.

Un pais relativamente chico, como Chile, nos enseñó que cuanto más débil es un país, más apegado debe estar a las reglas, señaló el director de la Fundación Standard Bank.

Félix Peña hizo también alusión a un acto relevante, como fue la aprobación por parte del Colegio de Comisarios de la UE de la idea de relanzar las negociaciones con Mercosur, anuncio que se concretará el próximo 17 de mayo en Madrid. La primera percepción es que esta decisión política se adopta porque es conveniente para los intereses europeos. Y si hay impulso político, los nudos se terminan desatando.

Se deben negociar puntos de equilibrio que justifiquen la firma de un acuerdo. En realidad, lo que se hizo es contrastar con “los costos de no negociar”, señaló Peña.

Hay que tener en cuenta algunos factores que actuarán como contexto:

La crisis global no terminó, los desplazamientos de las placas tectónicas del sistema mundial no se terminaron de producir. El concepto de UE se aproxima a una crisis existencial, en lo que se refiere a la existencia del Euro, aunque hay que reconocer que normalmente Europa destraba sus problemas.

Finalmente en el Mercosur hay fuertes líneas contra la existencia del bloque, como por ejemplo las declaraciones del gobernador Serra, que plantea la urgente renegociación para alcanzar la idea de unión aduanera, además de agregar que el ingreso de Venezuela “sería una insensatez”.

La negociación será relevante si tiene éxito, porque se trata de negociaciones triangulares, como las tratativas simultáneas que se mantienen entre UE-Mercosur y UE-India, que aparentemente se anticipó concluirá en octubre.

Escenarios

a) Relanzamiento de la negociación el 17 de mayo
b) Relanzamiento y fracaso a causa de la resistencia de sectores agrícolas
(De acuerdo con informaciones de prensa posteriores a la ponencia, Francia, principal país beneficiario de la Política Agrícola Común (PAC), fue apoyada por un grupo de naciones europeas que “estiman que los intereses de ambas regiones no permiten presagiar "progresos" en las negociaciones, salvo si Europa acepta "nuevas concesiones" en materia agrícola, algo que sería "inaceptable").
c) Inercia, statu quo, círculo vicioso


Facilidades de inversión para AL

En un trabajo editado una semana antes de conocerse la decisión de Europa de retomar las negociaciones con Mercosur, Félix Peña llamó a que la Cumbre ALC-UE produjera un plan de acción orientado a proyectar un espacio inter-regional hacia un horizonte 2020, impulsando iniciativas y mecanismos que faciliten el trabajo conjunto. En eso se ha estado concentrando en los últimos meses la etapa preparatoria de la Cumbre del mes de mayo en Madrid, que incluyó múltiples reuniones especializadas, destacó.

El MERCOSUR reitera su voluntad de avanzar en las negociaciones con la Unión Europea tendientes a alcanzar un acuerdo de libre comercio comprehensivo y equilibrado. Las exportaciones de nuestro bloque a la Unión alcanzaron un promedio de 55.000 millones de u$s para los años 2006 a 2008, lo que implica un 20% de los envíos totales al mundo. Al mismo tiempo, los países de la Unión Europea son los primeros inversores directos en la región.

Un acuerdo de asociación no solo permitirá fortalecer estas corrientes comerciales, sino también abrir nuevas oportunidades para los sectores productivos del MERCOSUR en el importante mercado comunitario. Al mismo tiempo, la negociación con la Unión Europa servirá para vitalizar el proceso de perfeccionamiento de la unión aduanera del MERCOSUR.

Esto implica que las negociaciones entre el MERCOSUR y la UE deberán ser claramente compatibles con los esfuerzos del MERCOSUR a favor de una mayor diversificación de su estructura productiva y el crecimiento del empleo. El MERCOSUR parte de la base que el comercio internacional debe jugar un papel en la promoción del desarrollo y el alivio de la pobreza, señala.

Específicamente, el futuro acuerdo de asociación deberá abordar las demandas de acceso de los productos de interés del MERCOSUR, en especial los bienes agrícolas y procesados, así como preservar suficientemente los espacios de política del MERCOSUR en otros ámbitos.

Los intercambios previos entre el MERCOSUR y la Comisión Europea indican que queda un largo camino por recorrer, en el cual se deberá asegurar que ambas partes obtengan claros beneficios económicos del futuro Acuerdo de Asociación. El MERCOSUR se encuentra preparado para trabajar hacia ese objetivo común.

Y un tercer carril, complementario de los otros dos, tiene que ver con el lanzamiento de mecanismos especiales para fortalecer la cooperación entre las dos regiones y sus distintos países. Tres podrían destacarse como resultantes de los trabajos preparatorios de la Cumbre de Madrid. Uno es la creación de una Facilidad de Inversiones para América Latina, con una dotación inicial de recursos financieros europeos, con el objetivo de fortalecer la integración regional, los programas de cohesión social y el desarrollo de la infraestructura física. El otro, es el lanzamiento de una Fundación Euro-Latinoamericana, como un instrumento funcional a la idea de lograr una mayor visibilidad en las acciones que se desarrollen en la construcción de la asociación bi-regional. En el ámbito de la ASEM, existe una Fundación que tiene ya una trayectoria acreditada (ver sobre la Asia-Europe Foundation en http://www.asef.org/). Y el tercero, es un plan de acción conjunto en investigación, tecnología e innovación, con múltiples desdoblamientos vinculados a los distintos campos de cooperación bi-regional.

Si esos son los principales resultados de la Cumbre de Madrid, se habrían justificado las expectativas que generan en la opinión pública estas reuniones al más alto nivel político. Tales resultados serían, sin duda, amplificados si es que en ocasión de la Cumbre se relanzan las negociaciones para un acuerdo de asociación bi-regional entre la UE y el Mercosur, que se encuentran estancadas desde octubre de 2004. Ello parece probable.

Graciela Baquero