Transformar el acuerdo macro en un Mercosur Federal

A pesar de que el proyecto del Mercosur aparece en sus inicios como un intento por contrarrestar los efectos negativos de la globalización y aprovechar los positivos, su organización a nivel de acuerdos superestructurales dejó fuera del proyecto de integración a amplios sectores de la sociedad y la economía. “Nos mantuvimos en el tema macroeconómico prácticamente hasta el año 2000, y a comienzos del nuevo siglo, nos dimos cuenta de que el Mercosur era una cáscara con un enfoque de cuestiones macro, pero que no reflejaba a las regiones del país”, sostuvo el diputado Juan Carlos Massei en el marco del VI Encuentro de las Regiones del Mercosur desarrollado hace dos semanas en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Rosario. El bloque argentino de la Unión Parlamentaria del Mercosur (UMP) se impuso desde su inicio la tarea de lograr que el Mercosur alcance un fuerte acervo cultural y social para llegar a la gente, a las microregiones de las regiones. Para transformar el Mercosur macro en un Mercosur Federal, explicó el actual presidente del organismo. La UPM excede sus tareas parlamentarias para encarar iniciativas con la sociedad civil y las universidades, dando lugar a foros de integración regional, abocado a temas productivos, corredores bioceánicos, pasos andinos, haciendo especial hincapié en el proyecto de la Hidrovía. La unión parlamentaria deviene así en una institución que que posibilita "militar" la integración, la regionalización y el Mercosur en todos los confines de la Argentina. Partiendo de un precepto básico: la integración social es la que dará sustento a la integración económica.


Después de los grandes avances tecnológicos y de las telecomunicaciones, un día nos dimos cuenta de que el mundo se había globalizado y de que a través de la globalización, como un acto de acción y reacción, se había a su vez regionalizado. En la parte sur de Latinoamérica, tuvimos prisa por llevar adelante nuestro mercado común del sur, a través del Tratado de Asunción del ’91, y del de Ouro Preto del ’94.

Una unidad regional para contrarrestar también los efectos discordantes de lo que significa la globalización y potenciar sus efectos positivos. Desde Asunción y Ouro Preto, nosotros nos hemos dado cuenta de que esa aparición del Mercosur fue de superestructura, con un acuerdo macro de los países pero también de las grandes multinacionales, especialmente de Argentina y Brasil, que plantearon el marco económico. Nos mantuvimos en el tema macroeconómico prácticamente hasta el año 2000. A comienzos del nuevo siglo, percibimos que el Mercosur era una cáscara con una cuestión muy macro y que no se extendía a lo que significan las regiones –tomando el espacio de Argentina- ni tampoco a la verdadera integración desarrollada en lo social y cultural, en las micro regiones de las regiones.

Por eso nace el bloque argentino de la Unión Parlamentaria del Mercosur y la Unión Parlamentaria del Mercosur. Desde las legislaturas provinciales nos reunimos en octubre de 2000, y manifestamos nuestra voluntad de participar en este proceso, como única forma de que todas las regiones de la Argentina podamos llevar adelante este Mercosur hacia el interior. De ahí nació el bloque argentino, y luego nosotros nacemos como Unión Parlamentaria Mercosur (UPM), en la cual están representados los cuatro países y los dos adheridos, Chile y Bolivia. En el caso de los chilenos se trata de Consejeros Regionales, los representantes uruguayos son Concejales Departamentales y los brasileños son Estaduales.

Las tareas de la UPM. Los foros de integración.

En ese sentido ¿cuál es nuestro trabajo? Fundamentalmente, nos impusimos la tarea de lograr que el Mercosur alcance un fuerte acervo cultural y social para llegar a la gente. Transformar el Mercosur macro en un Mercosur Federal. El bloque argentino de Parlamentarios del Mercosur está constituido por una mesa ejecutiva, con un presidente. En Argentina hay seis regiones representadas, el noroeste (NOA), el noreste (NEA), la Región Centro, la Región del Transcuyo, la Región Patagónica y la Metropolitana Bonaerense. Cada una de estas regiones tiene, por elección de cada Parlamento Regional, dos Vicepresidentes. La Mesa Ejecutiva está constituida también por 18 Comisiones de unidades temáticas de toda índole, en la cual trabajan todos los Legisladores de las regiones constituidas en la Argentina.

Para llevar adelante sus tareas, en la Cuarta Asamblea de Córdoba reunida para elegir nuevas autoridades, se avanzó en dos items muy importantes: el primero fue que decidimos que el Bloque Argentino Unión parlamentaria Mercosur debería trabajar interactuando con las Universidades, y con la sociedad civil a través de las organizaciones no gubernamentales. Ya existían convenios con casi todas las Universidades del país; con las Federaciones de los Municipios, en un esfuerzo por federalizar las acciones que impliquen llevar el Mercosur hacia las micro regiones.

También firmamos convenios con nuestra Cancillería, con la Comisión Parlamentaria Conjunta del Congreso de la Nación. Esto significa que la Unión Parlamentaria Mercosur ya no es más Parlamentaria, excede sus límites. Cada vez que celebramos nuestros Foros invitamos a todas las Organizaciones de la Sociedad Civil, a los Ejecutivos Provinciales y a todos los Foros Municipales que se van conformando en esta tarea de regiones y de Mercosur.

El segundo gran paso que hemos dado fue la creación de foros de integración regional a través de los principales temas, como los corredores bioceánicos, Pasos Fronterizos y Corredores Andinos, además de los Foros Productivos. Esto significa que en las seis regiones que tenemos representación, existen micro regiones que pueden ser corredores productivos, algunas más importantes que son corredores bioceánicos. No se olviden de que esta posibilidad concreta del sudeste asiático es una muy buena oportunidad para el Mercosur y nuestras regiones y micro regiones. Hemos dado un paso trascendente en el sentido de que hemos hecho un Foro del corredor bioceánico Central, en Córdoba, luego en el del Norte, en Catamarca por el Paso de San Francisco, y ahora estamos organizando el Foro del Paso de San Juan Coquimbo, que es de Agua Negra, para el 5 y 6 de noviembre. En ese Foro está interactuando la sociedad covil, las universidades, los gobiernos provinciales y municipales.

Lo importante de estas acciones es que trascendieron la frontera de lo estrictamente legislativo, para pasar a ser un organismo, una institución que permita “militar” la integración, la regionalización y el Mercosur en todos los confines de la Argentina.

En el comercio mundial del siglo XVIII y XIX, la importancia la tenía el Mar Mediterráneo, en el siglo XX el Océano Atlántico, y hoy en el siglo XXI la verdadera importancia del comercio mundial reside en el Océano Pacífico. Atendiendo a esta cuestión estratégica es que los Corredores Bioceánicos, especialmente en el caso del Central, se hacen muy importantes. Este Corredor Bioceánico Central comienza en el centro sur de Brasil, en el Estado de Minas Gerais, Matto Grosso do Sul, Rio Grande do Sul, Santa Catarina, Paraná; pasa por la Hidrovía Paraná – Paraguay, con lo que queda incorporado todo el Noreste argentino, Bolivia y Paraguay. Avanza por la región Centro, Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba, se abraza con el Gran Cuyo, Mendoza, San Juan, San Luis y La Rioja y desemboca en la IV y V Región chilena, en la cual están los pueblos de Valparaíso y San Antonio; en la V R a través del Paso de los Libertadores, y en la IV R el Paso de Agua Negra.

Integración social e infraestructura. Hidrovía y pasos andinos.

Esto es importante en los que hace a la integración económica, pero más importante lo es en materia de integración cultural y social, porque es lo que le va a dar sostén a la integración. La cuestión económica, puede tener vaivenes y decaer, pero si hay una cuestión arraigada en lo social y cultural, indudablemente se va a sostener en el tiempo. Cuando hablamos del corredor bioceánico (la “banana”) del Mercosur, estamos hablando de ciento veinte millones de habitantes, de una superficie de 3.500.000 km cuadrados, de una de las regiones más productivas de Latinoamérica. En esto hay una cuestión importante también a considerar, que es que las barreras físicas que nos separan, las vamos a tener que subsanar, y para esto habrá que hacer las obras de infraestructura necesarias que van a servir a la integración de este Corredor Bioceánico y también a la integración del Mercosur.

No nos olvidemos que, el 65% del mercado mundial está haciéndose a través del Asia-Pacífico. China es la locomotora, con un crecimiento del producto bruto del 10% y con sus 1.200 millones de habitantes. En este sentido, tenemos que aceptar que no tenemos otra salida que la integración con Chile, un país que tiene 14.000 km de costa hacia el Pacífico y trece pasos fronterizos, en los cuales tenemos todas las cuestiones sobre límites ya subsanadas. Por eso, en esta tarea que nosotros hacemos, un poco “evangelizadora” del Bloque Parlamentario del Mercosur, estamos concurriendo a todo tipo de Foros.

Con respecto a la Hidrovía Paraná - Paraguay, es trascendente la importancia que tiene para el corredor Bioceánico Central. Es un sistema de comunicación fluvial que va a unir a cinco países (Brasil, Bolivia, Paraguay, Uruguay y Argentina). Tiene un recorrido de casi 3.500 km, desde Puerto Cáceres al norte de Brasil hasta el Puerto Nueva Palmira en Uruguay, por supuesto pasando por el puerto argentino de Santa Fe en Rosario y San Nicolás. La idea de la Hidrovía es permitir que barcazas por arrastre, puedan navegarla todos los días las 24 hs. Para ello se necesita alcanzar un calado de por lo menos 10 pies de promedio mínimo en toda la extensión. Ya hay barcazas que están llegando de Bolivia al Puerto San Martín. Es una obra estratégica también en lo que hace a costos de flete; el transporte fluvial tiene un costo de U$S 0,9 toneladas x km, el ferroviario de U$S 2, y el vial de U$S 4. Esta obra ya fue incluida en la reunión de los Presidentes del Mercosur en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, en 2003, y fue ratificada en Copacabana y en Iguazú. Están representados todos los países por un Comité de Integración de Hidrovías, que ya realizó el proyecto técnico y la factibilidad económica, ya se arregló con la Corporación Andina de Fomento, que es la que va a financiar el proyecto (unos 70 millones de dólares en un plazo de ejecución de dos años). Los técnicos de nuestro Ministerio de Planificación Federal, estiman que en ocho meses se podría estar licitando.

En esa hidrovia tenemos que hacer obras complementarias, como la relocalización del Puerto de Santa Fe. Hay otras obras que van a hacer en conjunto Entre Ríos, Córdoba y Santa Fe, con aportes de las provincias; por ejemplo la Autovía Concordia – Entre Ríos – Santa Fe – San Francisco – Córdoba. Sería una vía de comunicación con la salida de Agua Negra al Puerto de Coquimbo.

Otra obra trascendente es el Paso Libertadores – Cristo Redentor. En el año1941 fue inaugurado este trasandino, pero en 1984 se ha congelado por falta de mantenimiento. Los gobiernos argentino y chileno tienen toda la voluntad de llevar adelante la obra, se va a hacer por una iniciativa privada, la empresa Tecnicagua. En este momento están armando los pliegos para llamar a licitación, con un plazo de dos años de duración de la obra. En este sentido es de gran importancia el Tren Trasandino, ya que va a ir desde Mendoza a Los Andes y Puerto de Valparaíso. Hoy, el Paso de los Libertadores se ha intensificado a través de la fluida comunicación que tenemos con Chile y de que el comercio con el sudeste asiático nos interesa sobremanera. Están pasando por este Paso 500 camiones diarios, a veces incluso se colapsa. El Tren Trasandino estaría transportando el equivalente a 650 camiones. Esto va a salir los primeros días de febrero de 2005, o sea, es una cuestión inminente.

Con respecto a Chile, el 50% del comercio exterior de Chile sale de la V Región, el Puerto más importante que tiene Chile es el Puerto de San Antonio, desde donde sale el 35% del comercio exterior chileno. El Paso de Agua Negra, en la IV Región, es una obra en la que se firmó, entre el Gobierno Nacional y la República de China, una carta de intención para que capitales chinos puedan llevar adelante esta obra. Todo esto nos permitirá anular las barreras para que nuestras regiones puedan integrarse mejor. Vuelvo a insistir en que creo que la integración va a tener éxito cuando tengamos una integración que cambie la vida de la gente. Hay que militar en lo social y cultural.

Graciela Baquero