Un Fondo de Garantías y un Banco de Desarrollo regional
Como conclusión del seminario-taller relacionado con la integración productiva organizado por CEFIR, la Cancillería argentina, la Agencia de Cooperación Española, ADIMRA y la CAF, se llevó a cabo el Encuentro Internacional “La Integración Productiva como Eje de Desarrollo Regional”. Allí se abordaron temas cruciales, como el fondo de garantías regional y la transformación de la CAF en un banco de desarrollo para AL.
La apertura de la jornada fue realizada por el Embajador José Alberto Vitar, Subsecretario de Integración Económica Americana y MERCOSUR del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.
En el marco del vigésimo aniversario de la creación del MERCOSUR, el encuentro, desarrollado en la sede de ADIMRA, contó con la presencia de funcionarios municipales, empresarios y consultores, que trabajaron en la evaluación de casos concretos de integración productiva.
Por otra parte, en el marco de la jornada, se presentó el libro publicado por CEFIR “Mercosur, 20 Años”, a cargo de su compilador, Gerardo Caetano, director académico del CEFIR, junto al secretario ejecutivo de la entidad, Federico Gomensoro.
También el responsable de proyectos de la Agencia de Cooperación Internacional (AECID), Julián Egea, presentó junto a Hugo Varsky, coordinador argentino del Grupo de Integración Productiva Mercosur, el libro sobre el Seminario-Taller “La integración productiva en la nueva agenda del Mercosur”, con la coordinación de Mariano Luna, jefe del Dpto de Negociaciones Internacionales de ADiMRA.
La apertura de un tema considerado crucial para el desarrollo de la integración estructural, como es la integración productiva, estuvo a cargo de José Alberto Vitar, Subsecretario de Integración Económica Americana y MERCOSUR (MRECIC), Miguel Gaya, de la Asociación Latinoamericana de Instituciones de Garantía (ALIGA) y Álvaro García, Representante de la Comunidad Andina de Fomento (CAF) en Argentina.
ADIMRA trabaja en la articulación público-privada a la hora de llevar adelante proyectos de integración productiva que tienden a impulsar y fortalecer el desarrollo regional. Uno de sus principales objetivos es el de brindar a los industriales herramientas que posibiliten un crecimiento sostenido y sustentable no sólo en el ámbito nacional, sino también a nivel regional, a través de su departamento de Negociaciones Internacionales y de Comercio Exterior y Mercosur.
Los entes de garantías regionales
En su intervención, el titular de la Asociación Latinoamericana de Instituciones de Garantía, ALIGA, se refirió a la importancia de fortalecer el sistema de fondos de garantías de cada país, para dar apoyo crediticio a la pymes, impulsoras del desarrollo en toda la región. Miguel Gaya aseguró que las garantías constituyen una herramienta idónea para ayudar al proceso de internacionalización de estas empresas. En Argentina, el sistema de Sociedades de Garantía constituye una herramienta de confianza, que permite dar credibilidad a la empresa en cualquier mercado, con condiciones aún mejores si existe un convenio de reciprocidad con la sociedad de otro país con el que se quiera negociar, lo que facilita el clima de negocios.
Un fondo de garantías del Mercosur sería de distinto tipo del conformado en Europa o en Asia, que disponen de un sistema de financiamiento piramidal. En el caso de países sin desarrollar estas áreas, como el Mercosur, el sistema dispondría de pocos fondos, con lo que sería más potente fortalecer los sistemas de garantía nacionales, donde desde este ente se acompañe al proceso regional.
La CAF, el banco de desarrollo regional
La Corporación Andina de Fomento (CAF), fortalecida y ampliada con capitales adicionales, está deveniendo en el banco de desarrollo de América Latina, aseguró el representante de la CAF en Argentina, Alvaro García.
La entidad, un banco público con sede en Venezuela, que actualmente está integrada por 18 países andinos, centroamerincanos, 10 sudamericanos, España, Portugal y 16 bancos privados, tiene como objetivo el desarrollo sustentable en la integración.
La CAF cumplirá un rol fundamental en momentos en que a pesar del aumento del precio de los commodities, América Latina debe enfrentarse al problema de la competitividad de su producción, y de la capacitación empresaria, que se transformarán en los elementos más dinámicos de la región, explicó García. Llamó a no caer en la autocomplacencia de seguir comercializando productos primarios y atender a la enorme brecha que nos separa de regiones como la de Asia Pacífico.
La participación de Argentina y Brasil como socios plenos hizo que aumentara la proyección subcontinental de la corporación.
En el caso del socio mayor del Mercosur, con un acuerdo de cooperación con el BNDES, el otro gigante del financiamiento al desarrollo de la región, pero de actuación limitada a Brasil. La existencia de un fondo regional presenta la ventaja de que los países miembros no deben competir en el otorgamiento de créditos con los fondos locales, expresó el representante nacional de una entidad que hace 40 años viene trabajando sobre las herramientas de desarrollo de las pymes que quieren internacionalizarse.
En el marco del vigésimo aniversario de la creación del MERCOSUR, el encuentro, desarrollado en la sede de ADIMRA, contó con la presencia de funcionarios municipales, empresarios y consultores, que trabajaron en la evaluación de casos concretos de integración productiva.
Por otra parte, en el marco de la jornada, se presentó el libro publicado por CEFIR “Mercosur, 20 Años”, a cargo de su compilador, Gerardo Caetano, director académico del CEFIR, junto al secretario ejecutivo de la entidad, Federico Gomensoro.
También el responsable de proyectos de la Agencia de Cooperación Internacional (AECID), Julián Egea, presentó junto a Hugo Varsky, coordinador argentino del Grupo de Integración Productiva Mercosur, el libro sobre el Seminario-Taller “La integración productiva en la nueva agenda del Mercosur”, con la coordinación de Mariano Luna, jefe del Dpto de Negociaciones Internacionales de ADiMRA.
La apertura de un tema considerado crucial para el desarrollo de la integración estructural, como es la integración productiva, estuvo a cargo de José Alberto Vitar, Subsecretario de Integración Económica Americana y MERCOSUR (MRECIC), Miguel Gaya, de la Asociación Latinoamericana de Instituciones de Garantía (ALIGA) y Álvaro García, Representante de la Comunidad Andina de Fomento (CAF) en Argentina.
ADIMRA trabaja en la articulación público-privada a la hora de llevar adelante proyectos de integración productiva que tienden a impulsar y fortalecer el desarrollo regional. Uno de sus principales objetivos es el de brindar a los industriales herramientas que posibiliten un crecimiento sostenido y sustentable no sólo en el ámbito nacional, sino también a nivel regional, a través de su departamento de Negociaciones Internacionales y de Comercio Exterior y Mercosur.
Los entes de garantías regionales
En su intervención, el titular de la Asociación Latinoamericana de Instituciones de Garantía, ALIGA, se refirió a la importancia de fortalecer el sistema de fondos de garantías de cada país, para dar apoyo crediticio a la pymes, impulsoras del desarrollo en toda la región. Miguel Gaya aseguró que las garantías constituyen una herramienta idónea para ayudar al proceso de internacionalización de estas empresas. En Argentina, el sistema de Sociedades de Garantía constituye una herramienta de confianza, que permite dar credibilidad a la empresa en cualquier mercado, con condiciones aún mejores si existe un convenio de reciprocidad con la sociedad de otro país con el que se quiera negociar, lo que facilita el clima de negocios.
Un fondo de garantías del Mercosur sería de distinto tipo del conformado en Europa o en Asia, que disponen de un sistema de financiamiento piramidal. En el caso de países sin desarrollar estas áreas, como el Mercosur, el sistema dispondría de pocos fondos, con lo que sería más potente fortalecer los sistemas de garantía nacionales, donde desde este ente se acompañe al proceso regional.
La CAF, el banco de desarrollo regional
La Corporación Andina de Fomento (CAF), fortalecida y ampliada con capitales adicionales, está deveniendo en el banco de desarrollo de América Latina, aseguró el representante de la CAF en Argentina, Alvaro García.
La entidad, un banco público con sede en Venezuela, que actualmente está integrada por 18 países andinos, centroamerincanos, 10 sudamericanos, España, Portugal y 16 bancos privados, tiene como objetivo el desarrollo sustentable en la integración.
La CAF cumplirá un rol fundamental en momentos en que a pesar del aumento del precio de los commodities, América Latina debe enfrentarse al problema de la competitividad de su producción, y de la capacitación empresaria, que se transformarán en los elementos más dinámicos de la región, explicó García. Llamó a no caer en la autocomplacencia de seguir comercializando productos primarios y atender a la enorme brecha que nos separa de regiones como la de Asia Pacífico.
La participación de Argentina y Brasil como socios plenos hizo que aumentara la proyección subcontinental de la corporación.
En el caso del socio mayor del Mercosur, con un acuerdo de cooperación con el BNDES, el otro gigante del financiamiento al desarrollo de la región, pero de actuación limitada a Brasil. La existencia de un fondo regional presenta la ventaja de que los países miembros no deben competir en el otorgamiento de créditos con los fondos locales, expresó el representante nacional de una entidad que hace 40 años viene trabajando sobre las herramientas de desarrollo de las pymes que quieren internacionalizarse.
Graciela Baquero